Roma/Madrid/París.- Al menos 11 personas han muerto en Europa por el impacto de la tormenta Ciarán, que ha dejado daños millonarios en medio continente por las inundaciones y el viento, más de medio millón de hogares sin luz en Francia y unos vientos huracanados que avivan un incendio forestal descontrolado en España.
Este gigantesco ciclón extratropical -el más virulento de los últimos tiempos en Europa occidental- cobró ayer la vida de dos personas en Francia, dos en Bélgica, una en España y otra en Países Bajos, a las que hoy se han sumado otras cinco en Italia, donde hay además cuatro desaparecidos.
Ciarán ha mantenido en alerta durante dos días a media docena de países, ha causado decenas de heridos y ha obligado a cancelar cientos de vuelos y a suspender o modificar servicios ferroviarios.
En Francia, hasta un millón de hogares se quedaron ayer sin suministro eléctrico (hoy todavía hay más de 500 mil), algo que se ha repetido también a menor escala en España y Reino Unido, y los vientos huracanados, que incluso han batido récord, han derribado árboles y han dañado viviendas y otras infraestructuras.
Una tormenta que esta noche descargó con furia en el norte y centro de Italia, sobre todo en la región de Toscana, donde la situación es de extrema gravedad, hasta el punto de que está previsto que el Consejo de Ministros que celebrará hoy el Gobierno italiano anuncie el estado de catástrofe nacional.
Según explicó en las redes sociales Eugenio Giani, presidente de Toscana, las imágenes que ha dejado el paso de Ciarán “son devastadoras”, tras la inspección llevada a cabo en helicóptero sobre las zonas afectadas de Campi Bisenzio, Prato y Quarrata.
En Campi Bisenzio, municipio de la región florentina donde la situación es más grave y donde el río Bisenzio se desbordó ayer en dos zonas, la gente tuvo que encaramarse anoche en los tejados de sus casas para ponerse a salvo y pedir ayuda, según los medios locales.
Desde el amanecer, helicópteros de Protección Civil han estado volando para controlar la situación y los bomberos han empezado a evacuar a las familias de sus casas anegadas gracias a que la lluvia ha parado por el momento aunque el fuerte viento continúa.
Los expertos de la región de Toscana esperan una fuerte crecida del río Arno en las próximas horas, cuyo pico será a las 12.00 horas (11.00 GMT) en su paso por Florencia y Pisa, con previsibles inundaciones.
Mientras tanto, en España sigue en alerta roja toda la franja del norte y noroeste ante la previsión de fuertes lluvias y violentas rachas de viento.
Precisamente el viento está avivando un incendio forestal declarado ayer al este del país, que ha afectado ya a unas 2.000 hectáreas y que ha obligado a desalojar a unas 850 personas de diferentes municipios de la zona, en el municipio de Montixelvo.
El fuego, del que aún no se sabe el origen, avanza sin control, ya que las fuertes rachas dificultan las labores de extinción; de hecho, ayer ni siquiera pudieron salir los medios aéreos.
Durante la noche ha habido en la zona rachas de viento entre 110 y 120 kilómetros por hora, aunque esta mañana la velocidad del viento ha descendido y es posible que durante la tarde haya “alguna ventana de oportunidad” para controlar las llamas, según el presidente de la región, Carlos Mazón.
Algo más de medio millón de hogares en Francia continúan sin electricidad este viernes debido a los efectos de Ciarán, con las regiones de Normandía y Bretaña como las más afectadas, porque hay lugares donde el sistema ha quedado literalmente destruido. El presidente francés, Emmanuel Macron, visitará hoy Bretaña.
Nueva tormenta llegará a España y Francia el fin de semana
Para el fin de semana, otra tormenta, llamada Domingos, barrerá España y Francia, también con vientos fuertes y lluvia.
El riesgo de inundaciones continúa siendo elevado en el sur de Inglaterra por Ciarán, cuyos vientos de unos 160 kilómetros por hora han provocado efectos devastadores en el Reino Unido, aunque “se está debilitando”, según señalaron este viernes las autoridades.
Casi 90 advertencias por inundación están aún hoy en vigor y hay más de 235 alertas emitidas por todo el país, tras las estragos ocasionados por la intensa lluvia y los fuertes vientos en la costa sur del país y en las islas del Canal.
Se prevé que el clima extremo continúe por ciertas áreas de Escocia y otras zonas del norte de Inglaterra durante la jornada, después de que ayer casi 150.000 hogares se quedaran sin electricidad. Según un portavoz de la Asociación de Redes Energéticas (ENA), alrededor de 135.700 habían ya recuperado la electricidad.
En el este de Escocia continúa en vigor una advertencia climática “amarilla”, que alerta de la amenaza de condiciones difíciles para la conducción, inundaciones y retrasos o cancelaciones en servicios ferroviarios y de autobuses, así como de una pequeña probabilidad de que se produzcan flujo rápido o profundo de agua de lluvia.
(Información elaborada con aportaciones de las delegaciones de la Agencia EFE en Italia, España, Francia y Reino Unido).
mcc