Los Brooklyn Nets enviarán a James Harden, una de sus tres superestrellas, a los Philadelphia 76ers a cambio del australiano Ben Simmons y otros jugadores, adelantaron el jueves medios de prensa estadounidenses.
Esta operación, la más esperada en la NBA, se concretó a menos de dos horas del cierre del mercado de fichajes.
Harden, ganador del MVP de la temporada 2018, y el veterano Paul Millsap serán enviados a los Sixers a cambio de Simmons, Seth Curry, Andre Drummond y dos elecciones de primera ronda del Draft, según el reputado periodista de ESPN Adrian Wojnarowski.
Los Sixers llevaban desde principios de temporada intentando resolver su conflicto con Ben Simmons, tres veces All-Star y una de las grandes fuerzas defensivas de la liga.
Simmons, que exigía el traspaso tras sentirse culpabilizado por el fracaso en los anteriores playoffs, no ha jugado un solo minuto esta temporada, lo que ponía en riesgo las opciones de los Sixers justo cuando su otra estrella, Joel Embiid, vive su mejor momento de juego.
Por su parte, Harden había dejado entrever recientemente su voluntad de salir de los Nets y reunirse en los Sixers con el ejecutivo Daryl Morey, quien fue su jefe deportivo durante años en los Houston Rockets.
Los Nets, que se arriesgaban a que Harden se marchara a final de temporada a cambio de nada, aceptaron finalmente sentarse a negociar el traspaso con Morey.
En las últimas horas, las diferencias se centraban en los jugadores adicionales que los Sixers enviarían a Brooklyn, entre los cuales finalmente entró el codiciado tirador Seth Curry.
De esta forma, se da por terminado el proyecto de ‘superequipo’ que conformaba Harden junto a Kevin Durant y Kyrie Irving.
Azotado por las lesiones, el trío fue eliminado el año pasado en la segunda ronda de los playoffs por Milwaukee Bucks y esta campaña ocupan una decepcionante octava plaza de la Conferencia Este.
El equipo que dirige Steve Nash suma nueve derrotas seguidas diezmado por una lesión de Kevin Durant y las continuas ausencias de Kyrie Irving, quien solo puede jugar los partidos como visitante por su negativa a vacunarse contra el coronavirus.
