Minnesota se está viendo afectada por una escasez de enfermeras escolares en todo el país, según la Organización de Enfermeras Escolares de Minnesota, publica un informe periodístico de Canal 5 ABC. “Había escasez antes de COVID, pero COVID lo ha empeorado aún más”, dijo Jolie Holland, enfermera escolar con licencia de la organización. Los datos estatales más recientes muestran que 637 enfermeras escolares trabajan activamente en las escuelas de Minnesota, según la Junta de Estándares y Licencias para Educadores Profesionales de Minnesota. Hay más de 2,000 escuelas públicas en el estado.
Holland dijo que eso significa que muchas escuelas no tienen ninguna enfermera escolar, especialmente en las zonas rurales de Minnesota. El estado requiere que los distritos con más de 1,000 estudiantes contraten a una enfermera escolar con licencia o contraten personal que sea enfermero certificado en salud pública. La junta estatal de licencias no tenía información disponible de inmediato sobre qué escuelas, si las hay, están actualmente por debajo de ese requisito. Holland dijo que ha hablado con distritos de todo el estado que no tienen personal médico profesional disponible para ayudar a los estudiantes.
“Le dije, ‘Oh, ¿qué haces con tu estudiante que es diabético?’ Y ella dice: ‘Oh, bueno, la abuela llama y le dice a la secretaria qué hacer’ “, dijo Holland, recordando una de esas conversaciones. “Le dije: ‘Eso me asusta’. Muchas escuelas no tienen un recurso. No tienen a nadie a quien llamar. Tienen que esperar que lo estén haciendo bien. Si eres un padre, si tienes un hijo que te importa en la escuela, si tiene un problema de salud, desea que acuda al profesional médico correspondiente”. Holland también trabaja a tiempo completo como enfermera escolar para las Escuelas Públicas de Howard Lake-Waverly-Winsted.
Dijo que las enfermeras escolares se han enfrentado a cargas de trabajo cada vez mayores en los últimos años, con un número creciente de estudiantes que padecen problemas de salud crónicos, como asma, diabetes y trastornos convulsivos. Esos estudiantes necesitan regularmente ayuda con medicamentos o equipo médico. Holland señaló que este año escolar presenta desafíos aún mayores, ya que los estudiantes regresan a clase en medio de una pandemia en curso. Dijo que COVID-19 y las incertidumbres de la próxima temporada de resfriados y gripe podrían significar que más estudiantes que nunca busquen ayuda de las enfermeras escolares.
“Los niños que estén juntos de nuevo, eso cambiará el juego de pelota. Probablemente veremos mucha más influenza, faringitis estreptocócica y mononucleosis”, dijo Holland. Ella dijo que los protocolos COVID-19 mejorados también han agregado más responsabilidades para el personal de salud escolar. Su distrito agregó personal de apoyo a su oficina, incluidos tres asistentes de salud a tiempo completo y varias enfermeras registradas a tiempo parcial. “Lo pondría como una de las principales prioridades”, dijo el superintendente de Howard Lake-Waverly-Winsted, Brad Sellner. “Con COVID-19 durante los últimos 18 meses, lo hemos visto simplemente multiplicarse por diez en términos de las responsabilidades de la enfermera de la escuela”.
Aún así, Sellner dijo que el financiamiento directo para las oficinas de salud escolar en todo el estado no ha sido históricamente un foco importante de los legisladores. “Definitivamente, con la escasez que está ocurriendo ahora en todo el estado, creo que es algo que debe analizarse”, dijo Sellner. Ha tenido conversaciones con administradores de escuelas vecinas que no pueden ocupar puestos de enfermería escolar. “Realmente están luchando por encontrar a alguien que ocupe ese puesto y están tratando de encontrar formas creativas de complementar tal vez con otras personas”, dijo Sellner.
