En el último año, la vida de Belinda ha tenido cambios radicales. En especial, por haber terminado su relación amorosa con el cantante Christian Nodal, con quien tenía planes de boda. Pero la cantante decidió no quedarse estancada, sino que buscó la manera de dar buena cara al mal tiempo y reinventarse.
Ahora, tras más de una década alejada de la pantalla no tuvo miedo de reconstruir sus sueños. Se fue a vivir a España, país de donde es originaria, lanzó nueva música —un tema dedicado a su expareja— e incluso aceptó un nuevo papel que representa un poco lo que siente en esta etapa: una mujer que no se preocupa más de la cuenta.
“Viene una Belinda renovada porque a mí siempre me ha gustado renovarme y aprender de cada paso que he dado”, afirma Belinda en entrevista.
“No había estado en un proyecto porque no es la cantidad que haces, sino la calidad; siempre he dicho que no es hacer por hacer, si dijera que sí a todo lo que llega a mi vida, quizás no lo disfrutaría tanto, y para mí se trata de la calidad del proyecto y cuando llegan las cosas, es porque tienen que llegar”, agrega.
La actriz participa en la serie Bienvenidos a Edén dando vida a África, una DJ que, a pesar de ser un poco superficial, tiene un espíritu conciliador y armónico con el resto de los jóvenes que conforman la trama: cinco chicos muy activos en redes sociales que reciben la invitación a una fiesta en una isla secreta, pero al terminar descubren que no se trata de un paraíso, sino que son parte de un experimento.
“Bienvenidos a Edén es de esos proyectos que llegó a mi vida cuando menos lo esperaba porque era el que tenía que hacer… cambié mi vida completamente, ahora vivo aquí y por lo menos durante todo este año voy a estar en España, así que estoy súper contenta, agradecida con esta nueva etapa, creciendo y evolucionando”, dice.
La cantante asegura que se ha valido de su humor y buena vibra para salir adelante, cuenta que incluso a su nuevo personaje le agregó un toque de comicidad que originalmente no estaba en el guión, pues en un principio la leyó muy seria y enojona, por lo que decidió “relajarla”.
“A África le encanta la moda, a mí también y en eso coincidimos, pero ella es muy maquiavélica, es una chica que le importa mucho lo de afuera, es narcisista y misteriosa, yo por el contrario soy muy transparente y cuando estoy bien y mal se me nota, lo más difícil fue transformarme en este personaje misterioso, pero ese toque de humor creo que sí me caracteriza, que cuando todos están preocupados yo siempre digo, ‘bueno, tranquilos, al mal tiempo buena cara’”.
La serie de suspenso, que estrena en Netflix el 6 de mayo, fue grabada desde febrero de 2021 en distintas localizaciones españolas como Barcelona, Alicante y Lanzarote, en abril se trasladaron a San Sebastián, donde sucede gran parte de la trama. En el elenco también participan actores como Amaia Aberasturi, Diego Garisa y Albert Baró.
“Siento que cada uno de los personajes es esencial y tiene que estar ahí por una razón, todo lo que leí cuando me llegaron los capítulos de Bienvenidos a Edén me encantó, desde la narrativa hasta cómo son los paisajes. Me convenció porque dije, ‘yo quiero ir a Edén’”.