Beijing.— China suspendió ayer toda cooperación con Estados Unidos en materia de calentamiento global y otras áreas, una decisión “irresponsable”, según Washington, que instó a Beijing a detener los ejercicios militares lanzados en torno a Taiwán para rebajar las tensiones, tras la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, a la isla.
Beijing “suspenderá las negociaciones sino-estadounidineses sobre el cambio climático” y anulará un encuentro entre dirigentes militares, así como dos reuniones sobre seguridad, declaró el ministro chino de Relaciones Exteriores. Los dos países más contaminantes del mundo se habían comprometido el año pasado a trabajar juntos y prometieron reunirse regularmente para “abordar la crisis climática”.
Beijing también dijo que suspendía la cooperación con Wa- shington en otras materias como repatriación de inmigrantes ilegales, justicia, delincuencia transnacional y lucha contra las drogas. La suspensión del diálogo sobre el cambio climático es “básicamente irresponsable”, reaccionó el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.
Kirby señaló que algunos canales de comunicación permanecen abiertos entre los oficiales militares en los dos países.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, mostraba su preocupación.
“Para el secretario general, no hay forma de resolver los problemas más apremiantes del mundo sin un diálogo y una cooperación efectivos entre los dos países”, declaró a periodistas el portavoz de Guterres, Stephane Dujarric, en referencia a China y Estados Unidos.
Estados Unidos también pidió a China que ponga fin a sus maniobras militares desde la controvertida visita de Nancy Pelosi a Taiwán. La movilización de aviones y buques de guerra, el mayor simulacro militar de la historia de China cerca de Taiwán, prosiguió el viernes.
Taiwán puso a su ejército en alerta y realizó ejercicios de defensa civil, pero el estado de ánimo general se mantuvo en calma. Mientras, la Casa Blanca convocó al embajador chino en Washington.