En una de las mejores noches de la selección mexicana en los últimos dos años, el Tri terminó cayendo 0-1 ante un Paraguay que aprovechó la única llegada peligrosa que tuvo.
El equipo comandado por Gerardo Martino salió con una delantera jamás vista ante la baja por lesión de Henry Martín y tuvo que echar mano de Roberto Alvarado como centro delantero, acompañado en las bandas por Uriel Antuna y Alexis Vega.
Desde los primeros minutos de acción el Tri se hizo dueño de la pelota y buscó el arco de los rivales pero ahí se encontró con un Antony Silva en plan grande que evitó a toda costa la caída de su arco.
Paraguay tomó confianza en el arranque del segundo tiempo y poco menos de 10 minutos de adelantar líneas le rindieron frutos para conseguir el tanto de la victoria a través de Derlis González, quien aprovechó un rebote en el poste para empujar la pelota al fondo de las redes.
Tras el tanto de nuevo México recuperó la tenencia pero sin encontrar ese toque en el último tercio que reflejara en el campo la superioridad que se vivió en el campo a lo largo de todo el encuentro.
Ya en los minutos finales y ante la desesperación del resultado, la afición en Atlanta comenzó con los gritos de “Fuera Tata” y volvió a aparecer el grito homofóbico que pasó desapercibido por el silbante.