Durante 25 años, Breaking Free ha honrado a las víctimas del tráfico sexual con una caminata y ceremonia anual. Si bien la misión de la organización sin fines de lucro con sede en St. Paul de ayudar a las mujeres a escapar de la prostitución y el tráfico sexual no ha cambiado, las tácticas que se utilizan para atraer a las niñas a la vida sí lo han hecho.
La reciente acusación del donante republicano Anton Lazzaro por cargos federales de tráfico sexual infantil destaca las acusaciones de lo que Flora Whitfield de Breaking Free llama un problema creciente. Una acusación reciente en Minnesota destaca cómo los traficantes de sexo utilizan las redes sociales para reclutar víctimas, según informa Fox 9.
Ella dice que los traficantes están usando las redes sociales cada vez más para atacar a las víctimas jóvenes. “Los traficantes y compradores pueden contactar a cientos de mujeres en una hora”, dijo Whitfield. La co-conspiradora de Lazzaro, Gisella Medina, también ha sido acusada en conexión, acusada de reclutar menores para participar en actos sexuales comerciales por dinero y regalos.
Las acusaciones detallan que Medina encontró y se acercó a las adolescentes en las redes sociales, una herramienta que, según Whitfield, puede usarse para la manipulación. “Si ven a una persona en línea, asumen que es real, que tienen estos autos, que tienen este dinero, que viven esta vida fantástica”, dijo Whitfield. Si bien algunos sitios de redes sociales pueden parecer inocentes, Whitfield insta a los padres a controlar todas las actividades en línea de sus hijos, especialmente las aplicaciones de juegos con funciones de mensajería.
“Si no está revisando las cosas de sus hijos, podrían estar hablando con cualquiera”, dijo Whitfield. Las cicatrices dejadas por el tráfico sexual duran para siempre, y muchas víctimas mueren por adicción, suicidio o violencia. Al aumentar la conciencia y la educación, Whitfield espera que las personas conozcan las señales y eventualmente puedan detener el ciclo antes de que comience.
“Ya sea que haya estado en una semana o cinco años, 10 años, es un viaje para toda la vida”. Breaking Free atiende aproximadamente a 250 víctimas de trata sexual cada año. Durante el último año, 13 de sus clientes fallecieron. Tanto Lazzaro como Medina se han declarado inocentes de múltiples cargos de tráfico sexual.