Christian Nodal está irreconocible. La gente se preocupa al verlo: es marzo de 2022 y acaba de terminar una de las relaciones más mediáticas en México: la que sostuvo con Belinda.
A partir de su ruptura con la cantante, Nodal preocupó a sus seguidores al aparecer constantemente con nuevos cortes y colores de cabello e incluso nuevos tatuajes, ahora en el rostro; un cambio de semblante y mucho más distante de la prensa.
Desde el atuendo hasta la actitud y haber cambiado de pareja —se hizo novio de la cantante Cazzu— recién terminada su relación anterior son el reflejo de una necesidad de llamar la atención, considera el psicólogo Juan Antonio Sánchez, quien cuenta con una especialidad en psicología clínica.
“Puede ser por falta de inteligencia emocional, por déficit afectivo, por alguna crisis temporal o para llamar la atención de alguien en particular, de la gente o sus seguidores en general”, señala.
Pero esto sólo ha reforzado esta metamorfosis en la carrera y la personalidad del cantautor de 23 años.
Nodal se ha caracterizado por romper paradigmas, desde el mismo género regional mexicana, al fusionarlo con otros como el urbano, hasta su look, que hoy poco o nada tiene que ver con el tradicional de los exponentes del regional.
La socióloga Regina Dorantes reconoce la forma particular en la que Nodal hoy se planta en la escena musical, a diferencia de hace seis años, cuando lanzó su primer disco en 2016.
“Las sociedades en las que nos encontramos actualmente nos permiten romper con paradigmas que se tenían en el pasado, el hartazgo a los tradicionalismos ha hecho que hoy en día rompamos con eso y estemos en situaciones que no nos comprometan, que sea todo más fluido”.
Christian no es el primer artista y probablemente no será el último a quien le ha llegado la fama rápidamente; se ha convertido en un personaje mediático y excéntrico, algo poco común en el género regional, y en un fenómeno musical.
Artistas como Post Malone tienen el cuerpo lleno de tatuajes, a manera de expresión, y nadie o casi nadie lo cuestionó, pero a Nodal no le fue tan bien como al cantante de hip hop después de tatuarse el rostro.
Las críticas llegaron, y Nodal respondió a los comentarios de sus detractores e incluso discutió en redes sociales con otro artista de la escena urbana, J Balvin; luego se disculpó con él.
Meses antes se había quejado y criticado sin reparos a su anterior compañía de discos, Universal Music.
La psicóloga Esthela Gastelum lo atribuye a la falta de control para manejar la fama.
“No hay edad para tener fama, pero no todos están preparados para afrontarla, de ahí que se deba tener salud mental y un buen mánager que cuide al artista”, argumenta.
En opinión de la socióloga Regina Dorantes, esta transformación camaleónica de Nodal puede ser resultado también de sus aspiraciones como artista, lo cual lo ha llevado a no comprometerse con un solo estilo en la música, ni en la imagen que transmite.
“La propia sociedad te va envolviendo para actuar de formas tan versátiles y volátiles, para alcanzar objetivos o metas como el reconocimiento, el interés económico, el poder o el número de seguidores”.
