El Estadio Azteca lució imponente, como nunca antes visto en un partido de la Liga MX Femenil. Un casi lleno Coloso de Santa Úrsula recibió el duelo de ida de la Gran Final entre América y Tigres.
El ímpetu y posesión de las Águilas no fueron suficientes para evitar la derrota en el primer capítulo de la lucha por el título en la liga rosa. Las Amazonas pegaron primero (0-1) y están a 90 minutos de conquistar su séptimo título.
Andrea Pereira, central de las azulcrema, declaró una noche anterior que América debía jugar como lo ha hecho sin modificar nada; lo hicieron, pero vencer a las dueñas del futbol femenil requiere algo más.
Kiana Palacios, Scarlett Camberos, Nicki Hernández y Katty Martínez intentaron de todas las maneras posibles, pero no tuvieron éxito.
Al 24′, la zaguera Bianca Sierra sufrió una terrible lesión en la rodilla derecha que la dejó sin posibilidades de seguir en el terreno de juego y tuvo que irse en camilla y con lágrimas directo al vestidor. Desgarradora imagen en la final.
Ya en la segunda mitad, las de Carmelina Moscato equilibraron las acciones y al minuto 48, Jaqueline Ovalle sorprendió a todas con un zurdazo desde fuera del área para vencer a Itzel González y abrir el marcador.
América siguió en el intento, pero las imprecisiones se adueñaron del juego azulcrema. Al final, las felinas se impusieron en la Capital y tienen en sus manos el quinto título de la Liga MX Femenil.
Por otra parte, el futbol Femenil volvió a hacer historia e impuso un nuevo récord de asistencia. Fueron 52 mil 654 aficionados los que se dieron cita en el Estadio Azteca. La Liga MX Femenil sigue creciendo, pero hay algo que no cambia: el dominio de las Tigres.