Un afroestadounidense de 31 años, primo de una de las cofundadoras del movimiento Black Lives Matter, murió horas después de recibir descargas eléctricas durante una intervención policial, anunciaron las autoridades de Los Ángeles.
Los hechos remontan al 3 de enero, pero suscitan un escándalo creciente luego de que la policía haya publicado el miércoles videos del arresto de Keenan Anderson, grabados por las cámaras portadas por los agentes que lo inmovilizaron.
En ellas se ve al profesor visiblemente febril y agitado tras haber estado involucrado en un banal accidente vehicular en el barrio de Venice, en Los Ángeles. Los oficiales lo reducen a la fuerza y le aplican descargas eléctricas de una pistola taser en el suelo para que deje de forcejear.
“Los policías lucharon con Anderson durante varios minutos, usando un Taser, su peso corporal, sujeciones firmes y llaves de brazo para vencer su resistencia”, explicó la policía de Los Ángeles en un comunicado.
“Tratan de hacerme lo mismo que a George Floyd”
El video muestra a Anderson pedir “ayuda” y gritar “tratan de matarme” o “tratan de hacerme lo mismo que a George Floyd”, mientras un policía aplasta su busto y su codo con su rodilla.
El 25 de mayo de 2020, el afroestadounidense George Floyd murió asfixiado durante una intervención de policía en Mineápolis, en Estados Unidos. Su muerte desató el movimiento de protesta “Black Lives Matter” (Las vidas de los negros importan) en ese país.
Llevado a un hospital tras el arresto, Anderson murió de un paro cardiaco.
“Lo mató la policía”, escribió en Instagram Patrisse Cullors, prima de Anderson y cofundadora del movimiento Black Lives Matter.
La alcaldesa afroestadounidense de Los Angeles, Karen Bass, pidió la suspensión inmediata de los policías a la espera del resultado de la investigación.
ass