Los servicios de Inteligencia de Reino Unido han apuntado a una “posibilidad realista” de que el Ejército ruso esté intentando tomar Vuhledar para obtener “éxitos propios” en su “competencia” con la compañía de mercenarios Grupo Wagner, que encabeza la ofensiva contra la ciudad de Bakhmut.
“Existe una posibilidad realista de que el Ministerio de Defensa ruso sea insistente en su impulso para un éxito en Vuhledar en parte porque quiere sus propios éxitos para competir con los logros del Grupo Wagner”, han dicho, antes de destacar que “los únicos éxitos tácticos recientes y notables” de Moscú han tenido lugar en el sector de Bakhmut.
Así, han manifestado que este sector “está dominado por las fuerzas de mercenarios del Grupo Wagner, que participa en una pelea pública con el Ministerio de Defensa ruso”, escenificada en varias críticas por parte del dueño del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, contra la cartera en torno al suministro de municiones para la ofensiva.
Por otra parte, los servicios de Inteligencia británicos han subrayado que “los intentos rusos de asaltar Vuhledar se han ralentizado durante la última semana después de los repetidos y extremadamente costosos ataques durante los últimos tres meses”, según una serie de mensajes publicados por el Ministerio de Defensa de Reino Unido a través de su cuenta en la red social Twitter.
“Uno de los factores en las grandes pérdidas sufridas por Rusia en este sector deriva de la adopción exitosa por parte de Ucrania del Sistema Remoto de Minas Antiblindaje (RAAM). El RAAM es un proyectil de artillería especializado que lanza minas antiblindaje a distancias de hasta 17 kilómetros desde la unidad de disparo”, han explicado.
En este sentido, han especificado que “en algunos casos, Ucrania ha lanzado las minas por encima y hacia la retaguardia de las unidades rusas en su avance, causando el caos cuando los vehículos rusos intentaban retirarse” tras los combates.
Por otra parte, Estados Unidos aseguró que la suspensión de Rusia del acuerdo nuclear New Start III es “legalmente inválida”, recalcando que la respuesta estadounidense a la invasión rusa de Ucrania no exime al Kremlin de la responsabilidad de cumplir sus obligaciones en el tratado.
“El incumplimiento de Rusia con el New Start y su supuesta suspensión del tratado son pasos desafortunados e irresponsables”, expresó el Departamento de Estado estadounidense en un comunicado, señalando que el cumplimiento mutuo del tratado fortalece la seguridad mundial.
Tras señalar que la suspensión de Rusia es “legalmente inválida”, Washington le recordó a Moscú que sigue estando obligada a permitir inspecciones sobre las armas nucleares, a notificar cada movimiento de sus fuerzas, o reunirse en la Comisión Consultiva Bilateral (BCC).
El Departamento de Estado aseguró que, si bien Rusia no ha tenido una actividad significativa por encima de lo estipulado en el tratado en 2022, “el hecho de que Rusia no permita inspecciones y proporcione notificaciones degrada la capacidad de Estados Unidos para evaluar los despliegues nucleares rusos”
De acuerdo con el comunicado emitido por el Departamento de Estado, Rusia que puede “remediar fácilmente” su incumplimiento al reanudar las actividades que realizó durante años bajo el tratado: realizar inspecciones, reunirse en el BCC y proporcionar notificaciones y datos.