Por Joel Cano
La presión de Estados Unidos al Gobierno de México para combatir el tráfico de fentailo ha llevado a que los cárteles de la droga busquen nuevos horizontes para fabricar este mortal opioide sintético. Es así que las organizaciones criminales han encontrado un nuevo país para mudar su producción: Colombia.
El 16 de marzo elementos de la Policía Nacional de Colombia llevaron a cabo la detención de un par de sujetos que fueron identificados como integrantes del Cártel de Sinaloa (uno de los principales responsables de la producción de fentanilo en México), quienes trabajaban para la facción de “Los Chapitos”, liderada por los hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán.
La detención de los dos individuos se realizó en el aeropuerto internacional de El Dorado, en Bogotá. Tras ella, las autoridades colombianas comprobaron lo que en un momento se sospechaba: que los cárteles mexicanos han buscado trasladar la fabricación del opioide a dicho país.
Los detenidos fueron identificados como Carlos Félix Guitérrez y Silvano Francisco Mariano, quienes contaban con una residencia en Culiacán, Sinaloa, aunque son originarios de otros estados, según reportes del semanario Proceso. Si bien aseguraron que su viaje a Colombia respondía a fines turísticos, sus planes eran otros.
Planes de ‘Los Chapitos’ en Colombia
Carlos y Silvano salieron de un vuelo de la Ciudad de México con una tarea en específico: contactarse con narcotraficantes locales y coordinar un plan para la “producción, venta y exportación” de fentanilo. Por ello, tenían programadas varias reuniones en Medellín y Bogotá, donde se pretendían instalar laboratorios clandestinos para su procesamiento.
Sin embargo, sus planes se vieron fustrados tras su detención, la cual fue dada a conocer seis días después por las autoridades. Incluso, el presidente de Colombia, Gustavo Preto, confirmó sus intenciones en una publicación en redes sociales. “Tratando de producir fentanilo, lo peor de lo peor, esta banda del cartel de Sinaloa es capturada en Colombia”, comentó en aquella ocasión.
En estas detenciones también participaron autoridades de Grecia y Guatemala. Posteriormente se supo que tanto Carlos como Silvano contaban con órdenes de captura con fines de extradición a Estados Unidos, pues presentaban cargos por tráfico de fentanilo, debido a un cargamento de 400 gramos de dicho narcótico que fue producido en México y llevado a territorio estadounidense, según la acusación de la Corte Federal del Distrito Sur de Nueva York.
‘Los Chapitos” tenían dos opciones para adquirir el fentanilo en Colombia, según reportes del periodista Rafael Croda (del medio referido). Una de ellas consistía en conseguirlo a través de los “desvíos” de la droga que se utiliza de manera legal en los hospitales del país (ya sea como analgésico o como tratamiento contra el cáncer). Esta práctica es recurrente, pues el Ministerio de Salud indicó que en 2022 se reportó el extravío de 88 ampolletas de dicho narcótico.
La segunda opción consistía en que el Cártel de Sinaloa recurriera a sus contactos en China para importarlo de manera ilegal. Este método ha sido identificado incluso por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien en varias ocasiones ha indicado que los precursores químicos empleados para la elaboración del fentailo llegan desde el país asiático.
Fentanilo en Colombia
La razón por la cual Colombia ha sido una alternativa para ‘Los Chapitos’ en cuanto a la fabricación del opioide tiene que ver con la “mano de obra, la experiencia y el conocimiento” que tiene los narcotraficantes locales para producir drogas.
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Aunque las autoridades colombianas no han encontrado un narcolaboratorio de fentanilo en su país, no descartan su exsitencia, pues el mortal opioide llegó hace dos años a Cartagena. Es decir, que hay consumo pero no producción (hasta el momento).
Lo cierto es que en septiembre de 2016, la Policía Metropolitana de Bogotá decomisó poco más de 122 gramos de 4-Anilo-fenetilpiperidona, un precursor químico utilizado en los laboratorios clandestinos para la preparación del fentanilo, el cual puede ser hasta 50 veces más potente que la heroína.
En México, el Cártel de Sinaloa no es la única organización transnacional que produce fentanilo, pues también se encuentra el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Estos dos grupos han sido señalados por la DEA como los principales responsables del tráfico de dicha droga a Estados Unidos. Es por ello que hay un interés entre los senadores republicanos por catalogar a esas dos agrupaciones como organizaciones terroristas extranjeras.
Lo anterior significa que el consumo y tráfico de fentanilo se ha convertido en un problema de alcance global. En 2021 se reportaron más de 71 mil decesos en Estados Unidos por sobredosis derivadas por opioides sintéticos.