Los crímenes violentos durante los primeros nueve meses de 2023 en Minneapolis, en comparación con el mismo período hace un año, tienen una tendencia a la baja, mientras que el número de oficiales jurados disponibles para patrullar ahora se ha reducido a solo 515. Según Canal 5 ABC informó en su portal de noticias, la subdirectora del MPD, Katie Blackwell, dijo a un comité del Concejo Municipal de Minneapolis que las tendencias de los delitos violentos, incluida la violencia cometida con armas de fuego, van en la dirección correcta, con homicidios, robos y el índice de violencia armada, todos disminuyendo significativamente con respecto al año anterior.
Pero el subdirector Blackwell también dijo que el departamento está al límite en este momento. “Las cifras son, obviamente, críticas. Creo que nuestro departamento enfrenta una carga significativa hasta el punto de que los policías se están cansando”, dijo Blackwell. Robin Wonsley, miembro del Concejo Municipal, le preguntó a Blackwell si debería haber más discusión sobre la adición de más oficiales cuando las tendencias delictivas disminuyen con los niveles actuales de personal del MPD.
“Cuando estábamos en nuestro punto máximo de más de 800 agentes hace varios años, lo que también vimos es que no se correlaciona con la seguridad de la comunidad”, dijo Wonsley. “Y eso es lo que también confirmaron los informes del Departamento de Justicia y del MDHR”. Blackwell dijo que sería difícil continuar a este ritmo con un número cada vez menor de agentes a largo plazo.
“Es fácil decir: mira toda esta reducción del crimen y lo estamos haciendo con sólo 515 policías de servicio, pero en realidad lo estamos haciendo con la ayuda de socios externos que lo están haciendo temporalmente con nosotros, ya sean civiles o temporalmente con nosotros para los eventos de verano”, dijo Blackwell. “Y ahí es cuando empiezas a tener más quejas contra los agentes, o posiblemente incidentes de uso de la fuerza, o salud mental, o todas estas cosas asociadas con ello”. Blackwell también dijo que los equipos SWAT ahora deberán usar cámaras en los cascos y su uso se regirá por las mismas políticas que se aplican a las cámaras corporales que deben usar los oficiales.
