La administración Biden pidió el martes a la Corte Suprema de Estados Unidos que intervenga y permita que los agentes de la Patrulla Fronteriza retiren el alambre de púas que el estado de Texas ha colocado a lo largo de un tramo de 29 millas del río Grande. La solicitud de emergencia del Departamento de Justicia dice que el cable tiene “graves consecuencias sobre el terreno…” para los agentes de la Patrulla Fronteriza, impidiéndoles patrullar la frontera “…y a las personas que están acusadas de detener”.

Según la información de CBS News Texas, la presentación se produce después de que un tribunal federal de apelaciones ordenara el mes pasado a los agentes que dejaran de cortar el cable, que Texas ha instalado como su propia medida de seguridad a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México. En una publicación en X, el gobernador Greg Abbott respondió a la presentación escribiendo “Nos vemos en la corte”.

El enfrentamiento legal se produjo el mismo día en que funcionarios de la ciudad de Nueva York describieron los últimos viajes en autobús de inmigrantes de Texas como “locos”. La oficina del alcalde de Nueva York arremetió contra los autobuses que llegaron a Nueva Jersey, en la víspera de Año Nuevo, aparentemente para tratar de evitar una nueva orden de la ciudad que exige que las compañías de autobuses avisen a los funcionarios de la ciudad con 36 horas de anticipación sobre su llegada y una lista de pasajeros.

“Este es un territorio nuevo”, dijo el alcalde de Nueva York, Eric Adams. “Y estamos revisando todas las autoridades que tenemos”. El gobernador Abbott publicó en línea que los transportes continuarían hasta que la administración Biden cambiara de rumbo en sus políticas fronterizas. Altos funcionarios de la Casa Blanca criticaron el martes a los legisladores republicanos, acusándolos de negarse a trabajar en una solución. El Presidente está buscando un paquete que incluya más fuerzas del orden, más jueces, procesadores de asilo y más recursos para las ciudades que ahora reciben a solicitantes de asilo y migrantes.

Se esperaba que hasta 60 republicanos de la Cámara de Representantes visitaran la frontera el miércoles en Eagle Pass, Texas. El representante de Texas, Tony González, dijo que sentía que las discusiones actuales sobre el tema son diferentes, y que más comunidades además de las fronterizas están comenzando a sentir el impacto del problema.

Se espera que las operaciones en cuatro lugares fronterizos que han estado cerrados desde el mes pasado, incluido el Puente Internacional Eagle Pass 1, se reabran el jueves. Los lugares se cerraron cuando se necesitó personal para ayudar a la Patrulla Fronteriza en otros lugares que estaban viendo un aumento en el cruce de personas.

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