Un equipo de la ONU dijo que constató un “gran número” de heridos de bala en un hospital de Gaza, después de que soldados israelíes dispararan contra una multitud cerca de un convoy humanitario, unos hechos que muestran la situación desesperada en el territorio palestino.
El sábado, el ejército israelí continuó bombardeando la Franja de Gaza, y causó al menos 92 muertos en las últimas 24 horas, según el Ministerio de Salud del movimiento islamista palestino Hamas, que gobierna este territorio.
Ante esta situación, Estados Unidos anunció que participará en el lanzamiento aéreo de ayuda sobre el territorio palestino asediado, bombardeado sin descanso por Israel desde que empezó la guerra, hace casi cinco meses, contra Hamas.
Según la ONU, 2.2 millones de los 2.4 millones de habitantes de este estrecho territorio están amenazados por la hambruna tras casi cinco meses de conflicto, que se ha cobrado la vida de más de 30 mil personas.
El jueves, soldados israelíes dispararon contra una muchedumbre hambrienta que había rodeado un convoy de ayuda humanitaria en el norte de Gaza. Según Hamas, 115 personas murieron y 760 resultaron heridas.
Un equipo de la ONU visitó al día siguiente el hospital Al Shifa de la Ciudad de Gaza, a donde ingresaron decenas de heridos en la tragedia.
Ahí vieron “un gran número de heridos de bala”, declaró Stéphane Dujarric, el portavoz del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres.
La comunidad internacional pidió que se investiguen estos hechos y un alto el fuego inmediato en la guerra.
Washington promete lanzar ayuda desde el aire
El conflicto se desencadenó el 7 de octubre, cuando comandos islamistas mataron a cerca de mil 160 personas, la mayoría civiles, y secuestraron a unas 250 en el sur de Israel, según un recuento de AFP basado en datos israelíes.
Una tregua de una semana en noviembre permitió canjear a un centenar de rehenes por 240 presos palestinos e Israel estima que unas 130 personas permanecen cautivas, 30 de las cuales habrían muerto desde entonces.
En respuesta, Israel lanzó una operación aérea y terrestre para “aniquilar” a Hamas, un movimiento al que cataloga, al igual que Estados Unidos y la UE, como organización “terrorista”.
Según corresponsales de AFP, en las últimas horas Israel prosiguió con sus bombardeos en la Franja, sobre todo en Khan Yunis y en Rafah, en el sur del territorio, en una campaña que hasta ahora ha matado a 30 mil 320 personas, sobre todo mujeres y menores, según el Ministerio de Salud de Hamas.
El viernes, el presidente estadounidense, Joe Biden, anunció que su país participará “en los próximos días” en el lanzamiento aéreo de ayuda sobre Gaza.
Varios países, entre ellos Jordania, empezaron a lanzar ayuda aérea sobre Gaza. Francia, Países Bajos, Reino Unido y Egipto apoyaron también ese gesto.
“Todo el mundo tiene hambre”
Por vía terrestre, la ayuda humanitaria llega de forma muy limitada, a través de Rafah, al estar supeditada a las autorizaciones de Israel, que impone un bloqueo en Gaza desde 2007.
“Nos dieron sacos de harina de la ayuda que llegó el día de la masacre en Gaza, el jueves”, dijo Hisham Abu Eid, un habitante de 28 años del barrio de Zeitun. “Pero esto no basta. Todo el mundo tiene hambre. La ayuda es escasa e insuficiente”.
En los últimos días, diez niños murieron de “malnutrición y deshidratación” en el enclave, según el Ministerio de Salud gazatí.
Por su parte, el canciller francés, Stéphane Séjourné, consideró que “la responsabilidad del bloqueo de la ayuda es claramente israelí”, en una entrevista publicada este sábado en el diario Le Monde.
En el plano diplomático, Catar, Estados Unidos y Egipto llevan semanas intentando llegar a un acuerdo sobre una tregua de seis semanas, que incluya la liberación de rehenes a cambio de prisioneros palestinos y la entrada de grandes cantidades de ayuda en Gaza.
El viernes, Biden admitió que la tragedia ocurrida durante la distribución de ayuda complica las negociaciones de una tregua, pero afirmó “esperar” que se logre un acuerdo en ese sentido antes de que empiece el Ramadán hacia el 10 de marzo.
“Eso espero, seguimos trabajando muy duro en ello. No estamos ahí todavía”, dijo.
El conflicto ha provocado hostilidades con otros países de la región. Este sábado, el Hezbolá libanés anunció la muerte de tres de sus miembros en un bombardeo israelí que, según la agencia de noticias libanesa, apuntó contra su vehículo, en el sur del país.