La vicepresidenta Kamala Harris visitó una clínica de salud reproductiva para mujeres de Minnesota que realiza servicios de aborto durante su visita al estado el jueves, que su oficina promociona como la primera vez que un presidente o vicepresidente en ejercicio visita un centro de salud reproductiva. “Estoy aquí en esta clínica de atención médica para destacar el trabajo que se está realizando aquí, en Minnesota, como un ejemplo de cómo es el verdadero liderazgo”, dijo Harris.
Según la nota periodística de Canal 4 CBS, mientras la campaña Biden-Harris buscaba resaltar la cuestión del aborto y la salud reproductiva de las mujeres, Harris advirtió que “nos enfrentamos a un problema de salud muy grave” en Estados Unidos. Usando uno de los lenguajes más fuertes que la administración ha usado hasta ahora para mostrar su defensa del derecho al aborto, Harris dijo que estos ataques contra “el derecho de un individuo a tomar decisiones sobre su propio cuerpo son escandalosos y, en muchos casos, simplemente inmorales”.
“¿Cómo se atreven estos líderes electos que están en el poder a creer que están en una mejor posición para decirles a las mujeres lo que necesitan, para decirles lo que es mejor para sus intereses”, dijo Harris. “Tenemos que ser una nación que confíe en las mujeres”.
Si bien el acceso al aborto ha sido garantizado en Minnesota desde 1995 en una decisión de la Corte Suprema estatal, Harris señaló que las instalaciones a menudo brindan atención a mujeres que tienen que viajar al estado para recibir abortos. El procedimiento es actualmente ilegal en más de una docena de estados , incluidos los vecinos de Minnesota, Dakota del Norte y Dakota del Sur, y está restringido en Iowa y Wisconsin.
Harris recorrió las instalaciones, habló con el personal y recibió información sobre cómo Minnesota se ha visto afectada por las prohibiciones del aborto en los estados circundantes. El centro ofrece una variedad de servicios, que incluyen aborto, control de la natalidad y atención preventiva de bienestar. Su oficina dijo que también tenía previsto hablar más tarde en un evento de campaña dirigido a mujeres. La visita es parte de su gira nacional “Lucha por las libertades reproductivas”, que es una iniciativa de la Casa Blanca.
El derecho al aborto se ha convertido en un importante tema de conversación en la campaña de reelección del presidente Biden, mientras él y Harris intentan conectar las leyes restrictivas del aborto con el expresidente Donald Trump y contrastarse como candidatos con una agenda de restaurar la protección del aborto. En 2022, la Corte Suprema de Estados Unidos anuló Roe v. Wade, que legalizó el aborto en todo el país en 1973.
El año pasado, la legislatura liderada por el DFL reforzó aún más el derecho al aborto al aprobar una ley estatal que garantiza un “derecho fundamental” al procedimiento. Atribuyeron la reacción contra la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos a su toma del Senado estatal y a mantener su mayoría en la Cámara en un año en el que los republicanos esperaban lograr avances.
Una actualización de la enmienda de igualdad de derechos de Minnesota, que agregaría lenguaje a la constitución estatal si es aprobada por los votantes, incluirá disposiciones destinadas a proteger el acceso al aborto cuando los defensores lo presionen este año.
En un evento de campaña a principios de este año en Wisconsin, Harris apuntó directamente a Trump por decir que estaba “orgulloso” de ayudar a limitar los abortos. Trump nominó a tres jueces conservadores para la Corte Suprema de Estados Unidos durante su mandato antes de la decisión Dobbs que anuló Roe v. Wade.
En este punto de las elecciones presidenciales de 2024, tanto Biden como Trump tienen suficientes delegados para ser considerados los presuntos candidatos a la presidencia de sus partidos, lo que prepara una revancha de la contienda en 2020.
