Derivado de la lucha contra el Covid-19, el 2021 fue un año para la ciencia, como ocurrió en el 2020, la creación de vacunas y, recientemente, la búsqueda de antivirales eficaces contra la enfermedad se han merecido el reconocimiento global de la comunidad científica. Sin embargo, el coronavirus no ha sido el único rubro en el que las científicas y los científicos se han destacado. Por ello, “Nature” creó una lista de 10 de las personalidades que aportaron avances de gran trascendencia para la ciencia.
Winnie Byanyima, defensora de la repartición equitativa de vacunas
Renunció a la carrera como ingeniera aeronáutica, en la que se forjó durante la academia, para salvaguardar los derechos de la población de Uganda, de la que es originaria. A través de los años, su búsqueda por hacer justicia rompió las barreras geográficas y hoy se ha convertido en una de las defensoras de la repartición igualitaria de vacunas que combaten al Covid-19.
A principios del 2020, cuando era muy poco aún lo que se conocía de la enfermedad del SARS-CoV-2 y la comunidad científica luchaba por encontrar una vacuna efectiva para su combate, la científica advirtió lo que ocurriría, inminentemente: la falta de acceso de biológicos en las regiones de bajos y medianos ingresos.
Para Byanyima, la donación de preparados contra el coronavirus no serían suficientes para inmunizar a la población de estos países. Por ello, argumentó que debían de generarse planes de acción en los que otras farmacéuticas asistieran a las empresas biotecnológicas, fabricantes de las vacunas, a producirlas en cantidades mayores. Aunado a esto, la experta abogó por la liberación de patentes.
“Esta idea de que se puede vender una tecnología sanitaria que salva vidas de la misma forma que se vende un bolso de lujo no es normal”, dijo la también directora de ONUSIDA. “No deberíamos normalizarlo, no deberíamos respetarlo y deberíamos llamarlo como es: inmoral, codicioso y equivocado”, recalcó.
Pese a que a lo largo de la pandemia, los defensores de la pandemia no dan su brazo a torcer, la discursiva de Byanyima ha sido capaz de cambiar algunas opiniones, ya que algunos de ellos se han aliado al objetivo de renunciar a la propiedad intelectual de los antígenos contra el coronavirus: “Sin decisiones políticas para reducir la desigualdad no podemos llegar a ninguna parte”, dice en cada estrado en el que tiene la oportunidad de pronunciarse.
Friederike Otto, precursora de la ciencia del clima
“El cambio climático es una de las mayores amenazas a la justicia”: Friederike Otto, doctora en filosofía de las ciencias y física, fue una de las primeras personalidades en cuestionarse si el cambio climático era responsable -o tenía alguna repercusión- en los eventos climáticos extremos, como olas de calor, aguaceros, sequías o incendios forestales, o si estos se generaban sólo como parte natural de los ecosistemas donde se producen.
Para desentrañar esta cuestión, la investigadora recurrió más de 50 modelos de simulación climática que midieron registros del clima y bases de datos que demostraron que el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero propició la frecuencia e intensidad de algunos fenómenos meteorológicos extremos, en particular el calor extremo, fueran mayores.
Pese a que, en el pasado, fue mucho lo que se especuló sobre la falta de fiabilidad de los modelos con que trabajó Otto, en la actualidad, han sido sofisticados, y orotgan confianza del panorama climático, publicado poco antes de la 26a Conferencia de las Partes (COP26) del tratado mundial sobre el cambio del clima: “me gusta la justicia y el cambio climático es una de las mayores amenazas a la justicia”, señaló la científica, por lo que prevé una nueva investigación en torno a las regiones más sensibles al cambio climático.
Zhang Rongqiao, líder en la exploración a Marte
El ingeniero Zhang Rongqiao coordinó la misión Tianwen-1, que significó el primer aterrizaje exitoso al planeta rojo por parte de la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA), con lágrimas en los ojos el tripulante aseveró encontrarse abrumado, luego que el vehículo de exploración espacial -Rover- viajará por más de 475 millones de kilómetros (km²).
Estados Unidos, junto con la NASA, ha sido la única región en lograr el aterrizaje de un Rover en Marte, por lo que esta misión ha reconfortado a la agencia china, ya que todas las otras agencias han fracasado en el intento.
Zhang monitoreo a un equipo de miles de técnicos que formaron parte del ensamblaje de Tianwen-1, proyecto que consta de un orbitador, un módulo de aterrizaje y el rover, conocido bajo el nombre de “Zhurong”. Este logro le ha merecido el reconocimiento del gigante asiático, que ya lo llama “héroe nacional”, ya que la misión es un ejemplo de la capacidad de China para introducirse en la carrera espacial en la que, todavía hoy, figuran -exclusivamente- Estados Unidos (NASA) y Rusia (Roscosmos).
Timnit Gebru, tras trabajar para Google, llega la indecencia intelectual de la IA
Fue destituida de su puesto en Google, luego de diferir con la empresa por los resultados de una de sus investigaciones, pues estos perjudicaban la imagen de la empresa por sesgos discriminatorios. La pérdida de este puesto fue descrita por la estudiosa de la ética de inteligencia artificial (IA) como “horrible”, ya que atribuyó su despido como una acción discriminatoria por el color de su piel, por lo que muchas y muchos de sus colegas la apoyaron y alzaron la voz contra la empresa.
“Fue inmediatamente obvio que se trataba de censura”, dijo Luke Stark, un investigador que estudia los impactos sociales de la IA, y que describió a Gebru como “una voz de alto perfil”.
A partir de ahí, la investigadora creó un instituto de investigación independiente, con el objetivo de reconocer las inconsistencias IA, así como los daños que las tecnologías pueden propinar a sectores marginados de la población. Desde muy joven ha velado por la discriminación dentro del ámbito de la ciencia. Cuando trabajó en Microsoft descubrió, junto con la científica informática Rediet Abebe, que el software de reconocimiento facial no funcionaba tan bien en la identificación del género de las personas que no eran hombres blancos, Gebru se percató que hasta la IA era prejuiciosa.
Tulio de Oliveira, rastreador de ómicron y otras variantes
Fue uno de los investigadores que detectó a la variante ómicron, luego de estudiar muestras de casos positivos por Covid-19 en Botswana, Sudáfrica y Hong Kong, al detectar que ésta contenía 50 nuevas mutaciones, frente a la primera aparición del SARS-CoV-2, se preocupó por la letalidad que representaría para la población, ya que cabía la posibilidad que se transmitiera más fácilmente y huyera, además, de la respuesta inmune generada por las vacunas.
Pero este no es en el único descubrimiento en el que se encuentra involucrado, sino que también fue uno de los responsables de rastrear a beta, otras de las variantes del coronavirus. ¿Cuál fue su método de rastreo? Cuando de Oliveira, junto con su equipo de investigación, fueron notificados de el alza en la demanda hospitalaria, comenzaron a rastrear a las personas infectadas y estudiarlas.
El investigador ha declarado que al reconocer a ómicron sabía que eso supondría un agravio para Sudáfrica, ya que cuando apareció beta, las restricciones e inmovilidad de la región, para sofocar la infecciosidad poblacional, afectaron severamente la economía de la región. Sin embargo, sabía que era lo correcto: “la forma en que uno detiene una pandemia es mediante una acción rápida”, dice el bioinformático brasileño. “Esperar y ver no ha sido una buena opción”, recalcó.
John Jumper: predictor de proteínas
El desarrollo de “AlphaFold”, una herramienta de inteligencia artificial (IA) encargada de determinar la estructura cualquier proteína, de modo causi perfecto, todos sus intrincados pliegues, bolsillos y superficies catalíticas, de forma tan sencilla como hacer clic a un tutorial en YouTube, estuvo a cargo de John Jumper, un revolucionario de la biología estructural.
La lucha por la predicción de la estructura de las proteínas fue ganada, ya que por largo tiempo muchos grupos de investigación aspiraban a desentrañar este enigma. Pero para que el físico y sus colegas fueran los ganadores primero tuvieron que destruir sus primeros esfuerzos, en 2018, y reconstruirlos: “aplicar la IA a un problema científico fue realmente mágico”, recordó Jumper.
Victoria Tauli-Corpuz ve por el bien de los pueblos
Una líder indígena de Filipinas ha luchado por los derechos pueblos indígenas por más de seis años, a través de la relatoría especial de la ONU. Gracia a esta labor, durante la más reciente edición de la COP26 una docena de organizaciones se comprometieron a donar mil 700 millones de dólares para la preservación de bosques, proteger la biodiversidad y prevenir el calentamiento global en estas regiones nativas, ya que para la activista este grupo de la población es el administrador más capacitado para salvaguardar los hábitats.
Para Tauli-Corpuz “los destinos de los pueblos indígenas y los bosques del mundo están inextricablemente entrelazados”. Por ello ha defendido, expresamente, que la teoría de “conservación de la fortaleza” no es más que una interpretación reduccionista. Este pensamiento se basa en la idea que, la naturaleza sólo puede ser preservada si está aislada de la humanidad: “hay que cambiar la mentalidad de la conservación”, dice, porque los bosques que contienen gran parte de la biodiversidad y el carbono de la Tierra también albergan a las poblaciones indígenas del mundo.
Guillaume Cabanac, detective de engaños
Científico informático se ha dedicado a identificar las frases más extrañas, vaciadas en los trabajos académicos: “estado bicho espeluznante subterráneo”, “malignidad del seno” y “fuerza orientada al Sol” son fragmentos extraídos de la literatura académica, que significan -realmente- “colonia de hormigas”, “cáncer de mama” y “energía solar”.
Como si de una novela de ficicón tratara, Cabanac lee diarimente trabajos acádemicos para rastrear “frases torturadas”, que si bien parecerían una labor graciosa, Cabanac se toma el problema muy en serio: “esto no debería estar sucediendo”. Su labor no reside úniucamente en analizar la literatura académica, sino que reporta las investigaciones dudosas, para que luego sean retiradas de los sitios web donde fueron publicadas.
Meaghan Kall, comunicadora del Covid-19
Epidemióloga del gobierno del Reino Unido, causó revuelo en las redes sociales cuando apareció una nueva variante del SARS-CoV-2. Cunado la publicación no estuvo satisfecha con las explicaciones de las autoridades sanitarias, la experta -sin consultar antes con su equipo de trabajo- generó un hilo en Twitter donde explicaba paso a paso las dudas más frecuentes de los usuarios. Esta fue la primera de una serie de explicaciones rápidas y accesibles de Kall sobre docenas de reuniones informativas sobre el coronavirus a lo largo del 2021.
Janet Woodcock: jefa de drogas
El cargo de Janet Woodcock como comisionada interina de la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) le valió un sinnúmero de críticas, pese a que ha trabajado en este centro por más de 35 años, y ha sido responsable de garantizar que los medicamentos sean seguros y efectivos antes de que sean aprobados para el mercado de esa región, la aprobación del fármaco aducanumab para el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer empeñó los logros sembrados otrora, ya que este medicamento ha demostrado incapacidad para atenuar los síntomas de la enfermedad, así como no tiene la capacidad de mejorar la función congnitiva. Sin embargo, hay quienes apoyan su pocisión frente a la agencia.
melc