La Haya, Países Bajos.— El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se lanzó contra el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) por haber solicitado a los jueces del tribunal la emisión de órdenes de arresto en su contra, así como en contra de tres dirigentes de la organización islamista Hamas, por presuntos crímenes de guerra y contra la humanidad.
Tras más de 200 días de guerra entre Israel y Hamas, el fiscal del tribunal con sede en La Haya indicó en un comunicado que tramitó las órdenes de detención contra Netanyahu y su ministro de Defensa, Yoav Gallant, por “matar deliberadamente de hambre a civiles”, “homicidio intencionado” y “exterminio y/o asesinato” en la Franja de Gaza.
“Los crímenes contra la humanidad mencionados (…) forman parte de un ataque generalizado y sistemático contra la población civil palestina en cumplimiento de la política de una organización. Según nuestras conclusiones, algunos de estos crímenes siguen cometiéndose”, declaró Khan.
Netanyahu, cuyo país no es parte de la CPI, enfureció por lo que llamó comparación entre Israel”, un país “democrático” y “los asesinos de masas de Hamas”. “¿Cómo se atreve a comparar a los monstruos de Hamas con los soldados del Tsahal [el ejército israelí], el más moral del mundo?”, cuestionó el premier.
Previamente, su ministro de Relaciones Exteriores, Israel Katz, había calificado la solicitud del fiscal como una “decisión escandalosa” y una “vergüenza histórica”.
El ministro de Exteriores, Israel Katz, viaja hoy a París para abordar el tema. Francia reafirmó su apoyo a la independencia de la CPI.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, también criticó duramente la decisión, que tachó de “escandalosa”, en tanto que el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, dijo que el anuncio del fiscal es “vergonzoso”.
“Seré claro: no importa qué insinúe el fiscal, Israel y Hamas no son equiparables de ninguna manera”, sostuvo Biden en un comunicado. “Siempre estaremos junto a Israel contra las amenazas a su seguridad”, subrayó.
Los cargos contra dirigentes de Hamas, entre ellos Yahya Sinwar, líder del movimiento islamista, incluyen “exterminio”, “violación y otras formas de violencia sexual” y “toma de rehenes como crimen de guerra” en Israel y en Gaza.
La solicitud también afecta a Mohamed Al Masri, más conocido como al Deif, jefe de las brigadas Ezedin al Qasam, el brazo militar de Hamas, y a Ismail Haniyeh, líder del buró político del movimiento palestino que reside en Catar.
“Afirmamos que los crímenes contra la humanidad a los que se hace referencia en las solicitudes forman parte de un ataque generalizado y sistemático llevado a cabo por Hamas y otros grupos armados en cumplimiento de la política de una organización”, afirmó el fiscal en la declaración. Hamas condenó la decisión y “los intentos del fiscal de la Corte Penal Internacional de equiparar a la víctima con el verdugo al dictar órdenes de detención contra varios dirigentes de la resistencia palestina”.
El fiscal de la CPI abrió en 2021 una investigación sobre las acciones de Israel y de Hamas y otros grupos armados palestinos, por posibles crímenes de guerra en los territorios palestinos. Khan afirmó que esta investigación ahora “incluye la escalada de hostilidades y violencia desde los ataques que tuvieron lugar el 7 de octubre de 2023”.
El fiscal ha pedido en varias ocasiones la liberación de los rehenes que están en poder de Hamas y ha advertido contra una operación militar israelí en Rafah. Si el tribunal emite la orden, cualquiera de los 124 Estados miembros de la CPI estaría obligado a detener a Netanyahu si se desplaza a su territorio. Esto podría complicar algunos de sus viajes, pero el tribunal internacional no dispone de una fuerza para asegurar el cumplimiento de sus órdenes, por lo que esto depende de sus miembros.