Beijing, China.- China anunció que investigará a la estadounidense PVH Group, matriz de Calvin Klein y Tommy Hilfiger, por tomar “medidas discriminatorias” contra productos procedentes de la región occidental china de Xinjiang.
El Ministerio de Comercio chino señaló en un comunicado que PVH es “sospechosa de boicotear injustamente” el algodón de Xinjiang y otros productos “sin base en los hechos”, lo que “daña gravemente los derechos e intereses legítimos de las empresas chinas pertinentes y pone en peligro la soberanía, seguridad e intereses de desarrollo de China”.
La cartera agregó que la empresa tiene un plazo de 30 días para enviar documentación que detalle las “medidas discriminatorias” que haya adoptado sobre los productos de esa región en los últimos tres años.
La pesquisa implica que el grupo pasa a una lista de “entidades no confiables” que podría prohibir a la empresa comerciar con China e invertir en el país asiático.
“Tomaremos las medidas pertinentes en función de los resultados de la investigación”, agrega el comunicado.
Estados Unidos demanda abusos del gobierno chino contra minorías en Xinjiang
En 2021, las potencias occidentales, con Estados Unidos a la cabeza, llevaron a la ONU los supuestos abusos del Gobierno chino contra los uigures y otras minorías en la provincia de Xinjiang, elevando la presión contra Beijing, que negó siempre todas las acusaciones y las calificó como un pretexto para tratar de hacerle daño.
EU, de la mano del Reino Unido y Alemania, convocó un acto virtual dedicado en exclusiva a analizar la situación en Xinjiang, que contó con los testimonios de activistas de derechos humanos, expertos y representantes de organizaciones como Human Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional.
Todos denunciaron graves abusos en la provincia noroccidental -con minorías musulmanas como la uigur sufriendo detenciones masivas, torturas y trabajos forzados- y con algunos Gobiernos, incluido el estadounidense, hablando de la existencia de un “genocidio”.
Esa zona produce aproximadamente el 20 % del algodón mundial y, según los denunciantes, las labores en el cultivo y recolección se realizan en parte gracias al trabajo forzado al que son sometidos los uigures por parte de las autoridades chinas.
sg