Sao Paulo, Brasil.- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva se sometió a un segundo procedimiento ayer por la mañana para detener una hemorragia cerebral, informaron sus médicos.
“(Lula) está neurológicamente perfecto, está óptimo”, informó tras la intervención el neurocirujano Marcos Stavale, uno de los médicos que lo atiende en el Hospital Sirio-Libanés de Sao Paulo, en una rueda de prensa.
El Presidente de Brasil fue operado por primera vez en el hospital el martes por un tipo de sangrado lento que resultó de una caída en su casa en octubre.
El segundo procedimiento fue ayer para tapar una arteria que continuaba filtrando sangre en la superficie del cerebro, según sus médicos en el hospital Sirio-Libanés.
Se prevé que el mandatario salga del hospital paulista el lunes o martes de la semana próxima y regrese a Brasilia, donde necesitará “reposo relativo por algunas semanas”
Lula se encontraba ayer “despierto y conversando”, según el neurocirujano Marcos Stavale, aunque todavía con prohibición de visitas excepto de familiares y de su esposa, Janja Silva.
Los médicos han dicho en los últimos días que la salud del Presidente es buena, pero muchos brasileños siguen preocupados, con algunos reuniéndose cerca del hospital para mostrar su apoyo.
Los medios locales informaron que algunos políticos han expresado preocupaciones sobre el futuro de su coalición en las elecciones presidenciales de 2026.
Lula, quien cumplirá 80 años durante la próxima elección, ha dicho que buscaría la reelección si fuera necesario, pero consideraría su salud antes de decidir si postularse.
No hay un sucesor claro para su liderazgo. Ricardo Kotscho, secretario de prensa en la primera administración de Lula, dijo que en su tercer mandato, el Presidente ha concentrado más poder que nunca.