La Patrulla Estatal de Minnesota ha publicado archivos después de un accidente de conducción en estado de ebriedad que involucró al alguacil del condado de Hennepin, David Hutchinson, en diciembre. Los archivos contenían fotos y audio relacionados con el accidente, según publicó Canal 5 ABC.

El 8 de diciembre, se informó un accidente de vuelco de un solo automóvil alrededor de las 2:30 am, a unas 5 millas al este de Alexandria en la Interestatal 94. Una solicitud de orden de registro indicó que Hutchinson les dijo a los testigos y agentes en el lugar que él no era el conductor del vehículo propiedad del condado después de que se estrelló cerca de Alexandria.

Más tarde ese mismo día, Hutchinson emitió un comunicado diciendo que condujo el vehículo después de haber estado bebiendo y se disculpó por sus acciones. Hutchinson fue acusado de cuatro delitos menores, uno de los cuales portaba una pistola bajo los efectos del alcohol. Ese cargo está programado para ser desestimado.

Se declaró culpable de un delito menor , DWI en cuarto grado, en relación con el incidente. Una junta estatal está investigando la condena por delito menor de DWI. Desde el accidente, los comisionados del condado de Hennepin han pedido la renuncia de Hutchinson. Según se pudo saber, la investigación demostraría que venía a una velocidad de 125 mph.

En respuesta, la oficina de Hutchinson proporcionó una declaración:

“Estoy totalmente comprometido a continuar sirviendo a la gente del condado de Hennepin que me eligió. Dejaré que los ciudadanos, no los políticos, decidan mi futuro en noviembre”.

Con respecto a la investigación del accidente, el coronel Matt Langer, del Departamento de Seguridad Pública de Minnesota, emitió un comunicado:

“Felicito el trabajo de quienes participaron en la investigación de este asunto, incluida la Patrulla Estatal de Minnesota”.

“En la escena del accidente, el Sr. Hutchinson afirmó que él no era el conductor. El enfoque de la investigación multifacética y colaborativa, que incluyó las órdenes de allanamiento ejecutadas, se propuso determinar quién estaba detrás del volante. Esa necesidad se disolvió cuando el Sr. Hutchinson admitió que conducía en estado de ebriedad”.

“No hay que minimizar ni defender las conductas de conducción y las decisiones involucradas en esta situación. La decisión del Sr. Hutchinson de conducir en estado de ebriedad, a velocidades superiores a 120 millas por hora sin usar el cinturón de seguridad, es exactamente lo contrario de lo que sabemos que ayuda a mantener a las personas seguras en nuestras carreteras. Nos alegra que las lesiones que sufrió no fueran más graves y que nadie más resultó herido”.

“Agradecemos al Sr. Hutchinson que asuma la responsabilidad de sus acciones y esperamos que otros aprendan de esta situación siguiendo nuestro firme y simple consejo de nunca conducir bajo los efectos del alcohol, obedecer el límite de velocidad, usar el cinturón de seguridad y prestar atención”.

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