El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, se jactó el martes de la efectividad de su programa de transporte de inmigrantes en autobuses, diciendo que ha brindado un “alivio crítico” a las ciudades fronterizas de Texas. Según Fox News Texas, el programa de Abbott ha demostrado ser la pesadilla de los demócratas en todos los niveles del gobierno, desde la Casa Blanca hasta las alcaldías en ciudades profundamente azules. Abbott sostiene que los pueblos de Texas han soportado el peso de la inmigración ilegal durante demasiado tiempo y han obligado a las “ciudades santuario” a comenzar a compartir la carga.
“Texas ha transportado en autobús a más de 35.000 inmigrantes a ciudades santuario autoproclamadas”, escribió Abbott el martes en X, la plataforma anteriormente conocida como Twitter. “Más de 11.300 a DC, más de 13.300 a Nueva York, más de 6.700 a Chicago, más de 2.600 a Filadelfia, más de 1.000 a Denver, más de 480 a Los Ángeles. Nuestra misión de transporte en autobús brinda un alivio crítico a las abrumadas ciudades fronterizas de Texas”.
El programa de transporte en autobús de Abbott ha creado conflictos entre los demócratas: los alcaldes exigen más apoyo de los funcionarios estatales y los funcionarios estatales exigen más del gobierno federal. La deteriorada relación del alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, con la gobernadora Kathy Hochul es un excelente ejemplo. Adams ha presionado al gobernador para que distribuya a los inmigrantes que llegan de Texas por más partes del estado de Nueva York para aligerar la carga para Nueva York.
Hochul hasta ahora se ha negado a hacerlo. Sin embargo, una cosa en la que Hochul y Adams están de acuerdo es que no creen que el presidente Biden esté haciendo su trabajo. Argumentan que Biden debe emitir una declaración de emergencia para abrir más fondos federales para el estado. Adams también ha exigido que Biden acelere el proceso de permisos de trabajo para los migrantes para que puedan mantenerse a sí mismos, en lugar de consumir recursos de la ciudad y el estado para alojarlos en refugios.
Los Ángeles votó a favor de demandar a Abbott por el programa la semana pasada. La oficina de Abbott desestimó esta medida. “Los concejales de la ciudad de Los Ángeles son unos completos hipócritas”, dijo el portavoz de Abbott, Andrew Mahaleris, a Fox News Digital en un comunicado. “En junio, votaron unánimemente para convertirse en una ciudad santuario, dando la bienvenida a los inmigrantes a la ciudad. Texas comenzó a transportar inmigrantes en autobuses a ciudades santuario como Los Ángeles el año pasado para brindar alivio a nuestras comunidades fronterizas invadidas y abrumadas”.
