Por Leobardo Vázquez Hernández
El futbol mexicano se encuentra envuelto en un nuevo escándalo de apuestas.
Luego de la suspensión de siete jugadores de la Liga Premier, quienes realizaban apuestas deportivas y recibieron un castigo un castigo de 57 años.
Las miradas se han colocado en la figura de Alan Mozo, defensor del Guadalajara que se encuentra bajo investigación, tras promover apuestas deportivas en sus redes sociales, algo prohibido por el reglamento de la FMF y la FIFA.
Fue mediante su cuenta de Instagram, que el exjugador de Pumas invitó a sus seguidores a unirse a un grupo de apuestas en Telegram.
“Esta de verdad será la última vez que pueda darles accesos gratuitos al grupo…”, colocó Alan Mozo en su perfil personal dirigiendo a un grupo llamado ‘Matías Bets’.
Lo realizado por el jugador, podría traer una fuerte sanción económica, además ser inhabilitado por tres años según el Código de Ética la FIFA.
“De conformidad con el art. 26 del Código de Ética de la FIFA, los siguientes comportamientos pueden estar sujetos a una investigación de integridad que podría derivar en una multa de mínima de 100 000 CHF y una inhabilitación de un máximo de tres años para ejercer actividades relacionadas con el futbol”, señala la FIFA en su sitio oficial.