Por Carlos Méndez
Auckland, Nueva Zelanda.- Una mujer canadiense fue arrestada en el aeropuerto internacional de Auckland, Nueva Zelanda, el pasado domingo tras ser sorprendida intentando ingresar al país con una significativa cantidad de metanfetamina oculta en paquetes que simulaban ser regalos navideños.
Según las autoridades neozelandesas, la droga, valorada en aproximadamente 2.2 millones de dólares (casi 45 millones de pesos), fue descubierta en el equipaje de mano de la viajera durante una inspección rutinaria. Los 10.2 kilogramos de metanfetamina estaban cuidadosamente empaquetados en cajas de regalo y escondidos dentro de una bolsa de lona roja.
Las autoridades han compartido imágenes de los paquetes incautados, así como una radiografía que revela la verdadera naturaleza de los “regalos navideños”. La mujer, cuya identidad no ha sido revelada, enfrenta cargos por importación y posesión de una droga controlada de clase A.
La pasajera “acaba de entrar en la lista de los malos de Santa Claus”, dijo la aduana de Nueva Zelanda en una publicación de Facebook.
Se multiplican envíos de droga desde Norteamérica
“Se trata de un intento clásico de los grupos delictivos organizados transnacionales de aprovechar la temporada alta de viajes. Pero un aeropuerto con mucha actividad no significa que la aduana no esté pendiente de cualquiera que pueda suponer un riesgo de tráfico de drogas”, dijo Paul Williams, director de Aduanas del aeropuerto de Auckland, en un comunicado.
“Estos grupos criminales cometen el error de pensar que la aduana no perseguirá objetivos más pequeños, pero sabemos que las drogas enviadas desde América del Norte son un riesgo creciente y estamos preparados”, agregó Williams.
Este incidente se suma a una serie de incautaciones de metanfetamina provenientes de Canadá en los últimos años. En 2022, las autoridades neozelandesas interceptaron una cantidad récord de esta droga escondida en contenedores de jarabe de arce. Se trataba de 713 kilos de metanfetamina por un valor estimado de 150 millones de dólares (más de tres mil millones de pesos). Seis sospechosos fueron arrestados en una operación encubierta en la que participaron agentes de Nueva Zelandia, Australia y Canadá.
