Lima.— El 52 periodo ordinario de sesiones de la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) comenzó ayer en Lima con la presencia de su secretario general, Luis Almagro, y el presidente peruano, Pedro Castillo, bajo el lema “Juntos contra la desigualdad y la discriminación”.

“Hoy los pueblos de las Américas sufren la desigualdad y la discriminación, a veces de la manera más abyecta, a veces de la peor manera, a veces porque socializamos de la peor manera, la discriminación y la desigualdad son formas de agredir a la dignidad de la persona”, sostuvo Almagro en la sesión inaugural.

En una rueda de prensa celebrada antes, Almagro comentó que la consigna elegida por Perú para esta cumbre es “muy apropiada” en una región que, tras 200 años desde su independencia, sigue siendo la “más desigual de todas”.

Evocando al expresidente uruguayo José Mujica, advirtió que “el primer cambio tiene que estar en la cabeza de la gente”, porque sólo así, aseguró, América podrá revertir sus patrones patriarcales y de discriminación, ya sea por edad, color de piel u orientación e identidad sexual.

La asamblea abrió con un mensaje del presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, instando a la región a condenar la invasión rusa y sumarse a las sanciones contra Moscú.

La cita clave de la OEA también discutirá medidas que apoyarán el fortalecimiento de los sistemas de salud para que sean más inclusivos y resilientes, la seguridad alimentaria en las Américas afectada por la guerra de Rusia en Ucrania y el liderazgo de la mujer en la promoción de la igualdad de género.

El mandatario Castillo instó a renovar “con franqueza y urgencia” su “apuesta por la igualdad” y dejar de lado los discursos de odio que, aseguró, representan “un peligro para la convivencia pacífica y democrática” del continente.

Dificultades con Nicaragua, “in crescendo”

Almagro declaró, en una rueda de prensa previa al inicio de la asamblea, que el gobierno de Nicaragua “definitivamente se ha distanciado” del organismo y que las dificultades para tratar temas políticos con el “régimen” de ese país “han ido in crescendo”. Agregó que “las dinámicas de presión sobre el régimen se han mantenido” y que la comunidad internacional ha seguido “reforzando las denuncias y condena” al gobierno.

Sobre Venezuela, afirmó que “el régimen” del presidente Nicolás Maduro “nunca terminó de concretar” su salida del organismo, puesto que, pese a que el mandatario anunció la retirada en 2017, no está “al día con todas sus obligaciones”. Será la tercera vez que la Asamblea General de la OEA se realizará en Lima. La cita tendrá la presencia del secretario de Estado de EU, Antony Blinken.

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