El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó el viernes como un “paso sin precedentes en la eliminación de las libertades fundamentales de las mujeres” la decisión de un juez federal conservador de suspender la aprobación de comercialización de una píldora abortiva, la mifepristona (RU 486).
“Mi administración peleará esta decisión” dijo Biden en un comunicado difundido por la Casa Blanca. De mantenerse dicho fallo, ello haría que cada medicamento regulado sea vulnerable a “esta clase de ataques ideológicos y políticos”, aseguró el mandatario demócrata.
El gobierno del demócrata “está totalmente en desacuerdo con la decisión” del tribunal, explicó el fiscal general y secretario de Justicia, Merrick Garland, en un comunicado. Dijo que el fallo “contraviene la opinión experta de la FDA (la agencia federal que decide sobre los medicamentos, ndlr), dictada hace más de dos décadas, de que la mifepristona es segura y eficaz”.
Amenaza a los derechos de las mujeres: Kamala Harris
Para la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, esta “decisión sin precedentes de hoy amenaza los derechos de las mujeres en el país a tomar decisiones sobre su salud y su capacidad a acceder a los medicamentos recetados por sus médicos”.
Diez meses después del histórico fallo de la Corte Suprema que le dio a cada estado estadounidense la libertad de decidir sobre el aborto en su territorio, el magistrado Matthew Kacsmaryk, conocido por su postura conservadora, emitió desde el estado de Texas (sur) una decisión que se supone debe aplicarse en todo el país.
Uno de sus colegas en el estado de Washington, consideró sin embargo que la autorización de comercialización de la mifepristona (RU 486), no podrá retirarse en al menos 12 Estados demócratas. Por lo tanto, le corresponderá a la Corte Suprema, cuya composición fue reformulada por el expresidente republicano Donald Trump (2017-2021) durante su mandato y con mayoría conservadora, aclarar la situación.
El fallo del juez Kacsmaryk no tendrá vigencia inmediata porque le dio al gobierno espacio para apelar.