El gobernador de California, Gavin Newsom, ordenó este jueves desmantelar los campamentos de personas en situación de calle en espacios públicos, un mes después de la Corte Suprema de Estados Unidos retiró protecciones a esta población en el país.
“El estado ha trabajado duro para abordar esta crisis en nuestras calles”, dijo Newsom en un comunicado. “Simplemente no hay más excusas. Es hora de que cada uno ponga de su parte”.
El gobernador Demócrata emitió una orden ejecutiva para que los departamentos del estado “aborden los peligrosos campamentos al tiempo que brindan apoyo y asistencia a las personas que viven en ellos”.
El estado dorado enfrenta esta crisis desde hace tiempo. Cerca de un tercio de la población en situación de calle en Estados Unidos vive en California, en la costa oeste del país.
La medida llega en un año electoral, cuando asuntos como éste, además de otros temas sociales como derechos reproductivos, violencia y migración, polarizan a los estadounidenses.
Las entidades municipales no están obligadas a seguir la orden, lo que puede alimentar el debate entre los demócratas del estado, quienes están divididos sobre como confrontar la problemática.
La alcaldesa de San Francisco, London Breed, comparte la perspectiva de Newsom. Breed dijo la semana pasada que la ciudad “será muy agresiva y decidida para mover los campamentos” a partir de agosto.
A la cabeza de la ciudad, famosa por su liberalismo, Breed reclama que las personas sin techo reciban protecciones legales incluso antes de que la justicia se pronuncie, atando las manos de la municipalidad para administrar los espacios públicos.
La Corte Suprema de Estados Unidos abordó el tema a partir de una demanda que fue presentada en una localidad del vecino estado de Oregón que buscaba validar dos acciones legales para prohibir a las personas sin techo de dormir en las calles.
Una corte local había fallado en 2022 que estas acciones del estado eran anticonstitucionales, pero en junio la Corte Suprema, de mayoría conservadora, revirtió esta decisión, algo festejado por los republicanos.
En Los Ángeles, en el sur de California, la alcaldesa Karen Bass cuestionó la sentencia, y dijo que permitía “la crimininalización de las personas que no tenían a donde ir por dormir en las calles”.
Los Ángeles totaliza la mayor cantidad de personas en situación de calle de California.
Bass trabaja en políticas que ofrezcan alternativas habitacionales para estas personas. Este año, esta población disminuyó un 10.4% en la ciudad.
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