California se ha convertido en el primer estado de Estados Unidos en limitar la venta de coches a gasolina.
La medida ha sido aprobada este jueves por la Junta de Recursos del del Aire de California (CARB, por sus siglas en inglés), el organismo estatal a cargo de combatir la contaminación ambiental.
Y establece que a partir de 2035 todos los coches nuevos que se vendan tendrán que ser eléctricos o modelos híbridos.
El objetivo de la medida es reducir de forma drástica las emisiones de dióxido de carbono en las próximas dos décadas y quienes la impulsaron ya hablan de que supondrá toda una revolución de la industria automotriz del país.
Y es que California es un gran mercado para el sector, con 29 millones de vehículos registrados.
La medida aún necesita la luz verde de las autoridades federales, pero es algo que se da por hecho teniendo en cuenta la agenda ambiental de la administración Biden.
El gobernador Gavin Newson, quien propuso la iniciativa hace dos años y le pidió a CARB elaborar un plan detallado, la ha calificado de “intrépida e innovadora”.
“Este es un momento histórico para California, para nuestros estados socios y para el mundo”, dijo por su parte Liane Randolp, presidenta de CARB, en una comparecencia previa a la votación.
Implementación progresiva
La medida se irá implementando de forma progresiva.
Así, para 2026 el 35% de los coches nuevos tendrán que ser cero emisiones, un porcentaje que deberá aumentar hasta alcanzar el 68% para el 2030 y el 100% en cinco años más.
Los fabricantes que lo incumplan podrán enfrentar multas de hasta 20 mil dólares por unidad, de acuerdo a CARB.
Los autos de este tipo ya han ido ganando popularidad en los últimos años en el estado.
Mientras en 2012 solo el 2% de los autos vendidos eran eléctricos, para 2018 ya constituían el 7% de las ventas de vehículos nuevos.
Y a día de hoy el porcentaje de vehículos no contaminantes alcanza el 16%, con un total de 1.13 millones registrados en el estado, entre eléctricos e híbridos enchufables. Es el 43% de todos los vehículos de este tipo que existen a nivel nacional.
También es una tendencia al alza en general en el país. De acuerdo a la Alianza por la Innovación Automotriz, el 4,4% de todos los coches nuevos que se venden en EU son eléctricos, el porcentaje más alto hasta la fecha.
Ahora, con la nueva medida, las autoridades californianas prevén que, con el plan, para 2040 las emisiones de los gases de efecto invernadero se reduzcan a la mitad.
Asimismo, esperan recortar las emisiones de dióxido de nitrógeno, que tiene un rol crucial en la formación del smog, en un 25% para 2037.
Lo que expulsan los autos del tubo de escape constituye la principal fuente de carbono dióxido de California y en 2019 representó el 40% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero.
Aunque la prohibición no implica que para 2035 los autos a gasolina dejarán de existir en el estado.
La medida se aplicará solo a autos, camionetas y SUV nuevos. Seguirá siendo legal conducir vehículos con motor de combustión interna, adquirirlos en el mercado de segunda mano o en otro estado.
Por ello, algunos grupos ambientalistas han tachado la medida de poco ambiciosa.
“No es tan estricta como podría haber sido”, dijo al respecto Regina Hsu, abogada en Earthjustice, una organización sin ánimo de lucro dedicada a litigar en casos medioambientales.
Los estados de Washington y Massachusetts ya han dicho que seguirán el ejemplo de California en la materia y se espera que otras entidades también lo hagan. Y es que son varios los estados, entre ellos Nueva York y Pensilvania, los que han adoptado algunos o todos los estándares sobre emisiones establecidos por California hasta ahora, más restrictivos que los federales.
Pero aunque sin precedentes en EU, la de California no es la primera iniciativa de este tipo a nivel internacional.
El Parlamento Europeo respaldó en junio un plan para prohibir la venta de vehículos a gasolina y diésel en los 27 países del bloque para 2035.
Y Canadá también tiene un mandato para lograr el objetivo para esa misma fecha.