Los maestros de miles de estudiantes de Minnesota están decidiendo si abandonar el trabajo. Los miembros de la Federación de Maestros y Profesionales de Apoyo a la Educación de Minneapolis comenzaron a votar el lunes sobre si deberían ir a la huelga, publicó Canal 4 CBS. Los maestros de St. Paul harán lo mismo más adelante esta semana. El resultado de las votaciones no conducirá inmediatamente a una huelga, solo les da la opción de autorizarla.
La última vez que el sindicato de maestros de Minneapolis votó a favor de la huelga fue hace 50 años. En ese momento, la maestra jubilada Jennifer Vaillancourt tenía 8 años y repartía café afuera del centro de votación. Ahora, después de una carrera de 33 años en el distrito escolar, está ayudando a los miembros del sindicato a emitir su voto para autorizar una huelga.
“Me encanta el Distrito Escolar de Minneapolis y estoy realmente preocupada por dónde está ahora”, dijo. Más recursos de salud mental, clases más pequeñas y salarios más altos son algunas de las demandas del sindicato. “Además de este proceso legal, hemos estado solicitando, reuniendo, marchando a la mansión del gobernador, asistiendo a reuniones de la junta escolar y no hemos visto el cambio que necesitamos de los líderes del distrito”, dijo Greta Callahan, presidenta del sindicato.
En un correo electrónico a las familias, las Escuelas Públicas de Minneapolis reconocieron la incertidumbre para las familias y expusieron las ramificaciones si hay una huelga. Dijeron que las clases se cancelarían y los proyectos, las fechas de graduación y los programas de verano podrían verse afectados.
Theresa Stets tiene tres hijos en el distrito. Ella apoya a los maestros y le gustaría ver clases más pequeñas. “No está funcionando como está, no tenemos suficiente personal en muchas de nuestras escuelas, especialmente nuestros profesionales de apoyo educativo”, dijo Stets.
En St. Paul, el distrito dijo que está enfocado en llegar a un acuerdo justo, equitativo y sostenible. Hasta entonces, el voto de huelga del jueves se cierne sobre maestros como Mary White. “Nadie quiere ir a la huelga, pero si nos permite obtener un contrato que apoye las necesidades de los estudiantes, así como las de los educadores… es lo que tenemos que hacer”, dijo White.
Si cada sindicato aprueba una huelga, notificará a su distrito y habrá un período de reflexión de 10 días. Los resultados de ambas votaciones se esperan para el jueves por la noche.
