El exprimer ministro japonés Shinzo Abe fue asesinado ayer en una ciudad al oeste de Japón por un hombre armado que le disparó cuando pronunciaba un discurso de campaña, en una nación que reportó sólo una muerte por arma de fuego en 2021, según la Agencia Nacional de Policía.

En 2020, hubo 32 muertes atribuidas a armas de fuego en este territorio, según Small Arms Survey. CNN reportó que en 2018, Japón, un país de 125 millones de habitantes, sólo reportó nueve muertes por armas de fuego.

En 2017, sólo hubo 22 tiroteos en la nación, indicó TIME.

El asesinato de Abe es “casi incomprensible” en un país con una tasa de muerte por arma de fuego de 0.01 por 100 mil habitantes y una tasa de homicidios aún más baja, escribió Iain Overton, director ejecutivo de la ONG británica Action on Armed Violence, en una publicación de blog, mencionó NPR.

Se desplomó sangrando

Tras los disparos, Abe se desplomó sangrando y fue trasladado en helicóptero a un hospital cercano en Nara, aunque no respiraba y su corazón se había detenido. Más tarde fue declarado muerto tras haber recibido transfusiones de sangre masivas, informaron las autoridades.

El jefe del Departamento de Emergencias de la Universidad Médica de Nara, Hidetada Fukushima, dijo que Abe sufrió daños en el corazón, junto con dos heridas en el cuello que dañaron una arteria. Nunca recuperó sus signos vitales, añadió Fukushima.

Un automóvil que se cree que transportaba el cuerpo del exprimer ministro japonés salió del Hospital de la Universidad Médica de Nara antes de las 6:00 horas de este sábado, informó NHK.

Abe llegó al hospital en estado de paro cardiaco a las 12:20 pm, hora local, según los médicos de la Universidad Médica de Nara. Fue declarado muerto a las 5:03 pm, hora local.

Fabricación casera

La policía en el lugar del atentado arrestó a Tetsuya Yamagami, de 41 años, un exmiembro de la Marina de Japón, bajo sospecha de asesinato.

La policía indicó que el agresor usó un arma que era casera —de unos 40 centímetros de largo— y los agentes confiscaron armas similares y su computadora personal cuando allanaron su apartamento de una habitación en una zona cercana. También se hallaron explosivos.

El atacante dijo a las autoridades que planeó su atentado por su rencor hacia “una organización específica”, según los medios locales. El agresor mencionó en sus declaraciones problemas familiares derivados de la pertenencia de su madre a esa organización, de posible carácter religioso y con la que, según el sospechoso, Abe tenía una “estrecha relación”.

Yamagami señaló en la víspera que decidió matar a Abe porque estaba “insatisfecho” con él, aunque “no le guardaba ningún rencor por sus principios políticos”. NHK agregó que la agencia policial dijo que las autoridades de la prefectura de Nara elaboraron ​​un plan de seguridad para el expremier en la ciudad.

Tobias Harris, un observador de Japón desde hace mucho tiempo con sede en Washington que escribió una biografía sobre Abe, le dijo a TIME que en Japón, “la distancia entre los políticos y el público es muy estrecha”.

Las autoridades dijeron que las pesquisas seguían su curso. La policía dijo que su investigación tenía un grupo de trabajo de 90 personas. El sujeto viajó a Nara en tren, pero la policía no pudo decir cuándo llegó. La autoridad detalló que el sospechoso admitió el ataque.


“Lamentable”

El asesinato de Abe “es un hecho muy lamentable. Estaba en un acto, una campaña, hay elecciones (…) y fue agredido. Le trataron de salvar la vida pero no fue posible. Entonces nuestro pésame al pueblo de Japón y al gobierno de Japón”, declaró el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.

El premier Fumio Ki- shida y los ministros de su gabinete volvieron a Tokio de eventos de campaña en otros lugares del país después del atentado.

El asesinato de Abe es “una tragedia para Japón y para todos quienes lo conocieron”, declaró el presidente de EU, Joe Biden. Donald Trump rindió homenaje a “un hombre que amaba y apreciaba a su hermoso país, Japón”. Barack Obama se dijo “conmocionado y entristecido” por el asesinato de un “amigo y socio desde hace mucho tiempo”.

“Les deseo (…) valor ante esta gran pérdida irreparable”, declaró el presidente ruso, Vladimir Putin. “El exprimer ministro Abe contribuyó a mejorar y desarrollar las relaciones sino-japonesas”, dijo un portavoz de la embajada China en Tokio.

El secretario general de la ONU, António Guterres, se declaró “profundamente entristecido”. “Mi familia y yo nos sentimos profundamente tristes al enterarnos de la muerte repentina y trágica del exprimer ministro Shinzo Abe”, hizo saber la reina Isabel II. Hubo mensajes, entre otros, desde Francia, España, Brasil, India y Argentina.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here