Por Arturo Sanguino
Pumas dominó, fue superior a Cruz Azul, pero el no haber metido una anotación en el partido de ida, les perjudicó en el estadio Ciudad de los Deportes. Los Cementeros derrotaron en el global 4-2 los universitarios y ya sueñan con la décima.
Los Azul y oro por un momento soñaron con la remontada, pero la buena actuación de Gonzalo Piovi y las atajadas de Kevin Mier, impidieron que esto sucediera.
El término “Cruzazulear” parece que quedó en el olvido y al ritmo de “Cruz Azul te pido nada, solo dar la vuelta”, se contagiaron para levantarse.
Cruz Azul sufrió, se preocupó de más por los Pumas, quienes le metieron un susto y pudieron ser más, pero la puntería les falló. Discreto planteamiento de Martín Anselmi, para un equipo que ilusionó a más de uno al arranque del torneo.
A pesar de caer como local, La Máquina está en las semifinales y espera a su rival. Los azules están a dos partidos del máximo sueño de llegar a la final, una ilusión que ha generado el técnico argentino en los jugadores cementeros y al funcionado.
El primer tiempo fue táctico para los dos conjuntos, quienes esperaron algún error, cosa que no pasó y grito de gol se quedó ahogado en los aficionados.
Cuando menos se espera una reacción de los vi distantes, llegó el centro de César Huerta y el cabezazo de Guillermo Martínez para poner el 0-1 poner a soñar a los suyos.
A Los del Pedregal no les quedaba de otra que seguir ofensivos y buscar esos goles que que les dieran el pase a semifinales. Al 63, fue el mimo “Memote” que tuvo la oportunidad de igualar el marcador pero su disparo pasó a un paso de la portería de Kevin Mier.
Minutos más tarde, al 76, llegaría la anotación y respiró para los de La Noria, con la anós ración de Alexis Gutiérrez. Pero esa alegría duraría poco con la anotación del Chino Huerta al 85.
Los nervios y tensión se vivió al final del partido, pero Lolo Faravelli calmó los nervios y puso el 2-2 en el partido de vuelta.
Martín Anselmi sigue con el sueño y la afición lo respalda, pero deben hacer su casa su fortaleza y guarida para la siguiente fase. La Máquina cerrará las semifinales de local.
Finalmente, con este estilo de juego, Gustavo Lema demostró que tiene las credenciales para seguir al mando de los Pumas y el próximo torneo ahora si luchar por el título.