El Cruz Azul de Martín Anselmi está hecho ‘una Máquina’ y por ahora no hay quien los pare. Ni el calor brutal de Monterrey ni fantasmas de ningún tipo pudieron evitar el triunfo por 1-0 en el estadio BBVA que despierta el sueño de la décima estrella.
Fuera de la cancha, de un lado adoptaron por dejarse el bigote y del otro se apoyan en numerología y canciones; sin embargo, dentro del campo de juego Cruz Azul juega mejor que el Monterrey y por eso ganó esta primera batalla en suelo regiomontano.
Martín Anselmi volvió a vencer a Fernando Ortiz en la batalla de estrategias y aunque este último movió todas las fichas que pudo para revertir el resultado, no pudo hacerlo y estiró su racha sin poder derrotar a la Máquina como entrenador de la Pandilla.
Carlos Rotondi (33’) convirtió el único gol del partido tras una gran jugada por el costado derecho y una asistencia de Alexis Gutiérrez. El argentino definió de primera intención al poste inferior izquierdo de Esteban Andrada y fue suficiente para firmar el triunfo celeste.
El siempre revulsivo Jordi Cortizo entró a la cancha en el segundo tiempo con la misión de repetir lo que hizo contra Tigres en cuartos de final y no tuvo éxito.
Monterrey no demostró ser la cuarta mejor ofensiva del torneo y se quedó sin argumentos ante la segunda mejor defensiva del Clausura. Kevin Mier, ni siquiera tuvo que esforzarse por mantener la portería en cero ante el pobre ataque local.
Sin embargo, los cementeros no se pueden confiar y como dice la canción de Julieta Venegas que la afición celeste adoptó como cábala esta Liguilla, esta es “una historia todavía sin final” que se definirá en el estadio Ciudad de los Deportes este domingo, donde tendrán ventaja deportiva y en el marcador global.