Los precios mayoristas en Estados Unidos subieron un 6,2% en diciembre respecto al año anterior, una sexta desaceleración consecutiva y una señal esperanzadora de que las presiones inflacionarias seguirán enfriándose, informó Canal 5 ABC con datos de Agencia AP. La última cifra interanual fue inferior al 7,3 % de noviembre y al máximo reciente del 11,7 % de marzo . Mensualmente, el gobierno dijo el miércoles que su índice de precios al productor, que mide los costos antes de que lleguen a los consumidores, cayó un 0,5% de noviembre a diciembre.

Los datos de precios al productor pueden proporcionar una señal temprana de hacia dónde podría dirigirse la inflación al consumidor. Los datos reflejan los precios que cobran los fabricantes, agricultores y mayoristas, y fluyen hacia un indicador de inflación que la Reserva Federal sigue de cerca, el índice de precios de gastos de consumo personal. La desaceleración en curso en el crecimiento de los precios mayoristas se suma a la evidencia de que el peor episodio de inflación en cuatro décadas está disminuyendo constantemente, aunque sigue estando muy por encima del objetivo de la Reserva Federal del 2%.

La caída del mes pasado estuvo liderada por los precios de la gasolina, que se hundieron un 13,4% de noviembre a diciembre. Los precios de la gasolina promediaron $3.36 por galón el miércoles, según AAA, por debajo del máximo de $5 por galón a mediados de junio. Los precios de los alimentos cayeron un fuerte 1,2%, encabezados por frutas, verduras y pollo. Una excepción fueron los precios de los huevos. Impulsado en parte por una ola de gripe aviar, los precios de los huevos se dispararon un 25% solo de noviembre a diciembre.

Excluyendo los costos volátiles de la energía y los alimentos, los llamados precios básicos al productor aumentaron solo un 0,1% de noviembre a diciembre. Medidos año tras año, los precios subyacentes aumentaron 5,5% en diciembre, en comparación con 6,2% en noviembre. “El panorama general es uno de rápida desinflación, con mucho más por venir”, dijo Ian Shepherdson, economista jefe de Pantheon Macroeconomics.

Los precios al productor en el vasto sector de servicios de la nación, desde restaurantes y hoteles hasta aerolíneas y lugares de entretenimiento, aumentaron solo un 0,1% de noviembre a diciembre, el aumento más pequeño desde abril pasado. La Fed ha estado monitoreando esta área de la economía en particular mientras evalúa su progreso en la lucha contra la alta inflación. Pero la creciente evidencia muestra que la inflación en toda la economía está disminuyendo después de haber alcanzado un máximo de cuatro décadas el verano pasado. A nivel del consumidor, la inflación también se enfrió en diciembre por sexto mes consecutivo a 6,5% en comparación con el año anterior, desde 7,1% en noviembre.

También se ha desacelerado una aceleración en los salarios de los trabajadores, lo que podría ayudar aún más a controlar la inflación. En diciembre, el crecimiento del salario promedio en los Estados Unidos aumentó un 4,6 % con respecto a los 12 meses anteriores , en comparación con un pico reciente del 5,6 % en marzo. Durante el año pasado, la Fed aumentó rápidamente su tasa de interés clave en un impulso agresivo para enfriar el endeudamiento y el gasto y controlar la inflación, que comenzó a aumentar hace más de un año y medio.

Los aumentos de tasas de la Fed, a su vez, han llevado a mayores costos de endeudamiento para consumidores y empresas. La tasa hipotecaria promedio sigue siendo casi el doble de su nivel hace un año , aunque ha bajado en las últimas semanas. Los costos de los préstamos para compras de automóviles, tarjetas de crédito y una variedad de préstamos comerciales también aumentaron considerablemente. A pesar de que la inflación general se desacelera gradualmente, los costos continúan aumentando en algunos sectores de la economía. Particularmente en el sector de servicios, el crecimiento de los salarios sigue contribuyendo a presiones inflacionarias más amplias.

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