El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el decreto “Keeping Men Out of Women’s Sports” (“Mantener a los hombres fuera de los deportes femeninos”), con el que prohíbe a mujeres trans participar en competiciones femeninas y ordena la negación de visados a deportistas trans que quieran competir en el país, una acción que ha provocado críticas entre activistas del colectivo.


Trump: “El deporte femenino será solo para mujeres”

Durante la ceremonia de la firma del decreto en la Casa Blanca, Trump aseguró que su gobierno está “protegiendo las oportunidades para mujeres y niñas de competir en condiciones justas y seguras”.

“A partir de ahora, el deporte femenino será solo para mujeres. Defenderemos con orgullo la tradición de las atletas y no permitiremos que los hombres las golpeen, las lesionen y hagan trampas contra nuestras mujeres y nuestras niñas”, señaló Trump durante su discurso.

La orden ejecutiva cita el Título IX de la Ley de Enmiendas Educativas de 1972 como la base legal para su implementación y advierte que se revocarán fondos federales a cualquier institución que no cumpla con la normativa.


“Es un ataque directo a nuestra comunidad”

Para activistas como Arianna Lint, responsable de la Fundación Arianna -una de las más importantes del país que vela por los derechos de la comunidad trans en EEUU-, la medida es discriminatoria y tendrá un impacto devastador en la juventud trans.

“Esta orden ejecutiva no solo es una medida discriminatoria, sino que también marca un precedente muy peligroso para las generaciones futuras”, expresó la activista, que se sometió a un cambio de sexo hace más de una década.

“No estamos hablando únicamente de mujeres trans en competencias profesionales, estamos hablando de jóvenes vulnerables, adolescentes que encuentran en el deporte una vía para su bienestar mental y físico”, recalcó, convencida de que “quitarnos ese derecho es negarles una oportunidad de desarrollo personal y social”.

Lint, que tuvo que huir de Perú por amenazas por su orientación sexual, también acusó a la administración Trump de usar a la comunidad trans como “cortina de humo” para distraer la atención de otros problemas más urgentes.


“Se está restaurando el mérito y la verdad biológica”

Por su parte, Fernando Godo, analista político y excolaborador de la campaña de Trump, defendió la orden ejecutiva y la consideró necesaria para restaurar la equidad en el deporte femenino.

“Lo que está haciendo la administración Trump es simplemente restaurar el sentido común y el mérito en las instituciones. Durante años, se impuso una agenda ideológica donde la identidad de género se volvió más importante que las calificaciones reales de una persona. Ahora, lo que se busca es que quien quiera participar en deportes femeninos lo haga basado en su sexo biológico, no en cómo se percibe”, dijo el también estratega político.

Según él, la inclusión de mujeres trans en deportes femeninos es “una distorsión de la realidad” y aseguró que “el sexo no se cambia, por más que alguien quiera hacerlo”.


Impacto en los Juegos Olímpicos de 2028

Uno de los puntos más controvertidos de la orden ejecutiva es su impacto en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. Aunque la Casa Blanca no ha especificado cómo afectará la medida a la participación de atletas trans en la competencia, Trump adelantó que intentará impedirlo.

“Queremos que el Comité Olímpico Internacional cambie todo lo relacionado con los Juegos Olímpicos y con esta locura transgénero. No permitiremos que compitan contra nuestras mujeres”, declaró el mandatario.

El presidente también instruyó al secretario de Estado, Marco Rubio, a comunicar al Comité Olímpico Internacional (COI) la posición oficial del gobierno de EEUU y a tomar medidas para restringir la participación de deportistas trans en eventos internacionales.


Un debate que no cesa

Mientras los defensores de los derechos trans califican la medida como “una agresión” y “un retroceso” en la igualdad de derechos, los partidarios de Trump la ven como una “victoria para la protección del deporte femenino”.

“Nosotras también somos madres, también somos hijas, somos tías, tenemos una familia. La gente cree que las personas trans vivimos al margen de la sociedad, pero no es así. Estamos en todas partes. Y, sin embargo, nos están diciendo que no tenemos cabida en el deporte. Eso es inaceptable”, sostuvo Arianna Lint.

Por otro lado, Godo insistió en que la orden ejecutiva simplemente restablece el “orden natural”.

“No es justo que con los impuestos de los ciudadanos se obligue a las instituciones a aceptar algo que biológicamente no es cierto”, defendió el analista.

Con todo, ambos coinciden en que con esta orden ejecutiva, Estados Unidos podría estar sentando un precedente que influya tanto en las políticas de otras naciones como en la regulación del deporte a nivel global.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here