Es el tipo de llamada que ningún oficial quiere recibir. Una emergencia de agua donde un niño de 4 años cayó a través del hielo en un estanque helado en el norte de Minneapolis. Pero el sargento Jeremy Depies y la oficial Ashley Bergersen no dudaron en entrar en acción, detalla el informe de Fox 9. “Jeremy y yo tenemos hijos de la misma edad que Eli”, dijo Bergersen a FOX 9. El video de la cámara corporal muestra a ambos corriendo hacia el agua para sacar al niño, llamado Eli, del estanque en noviembre pasado.
“Sabía que el tiempo era un factor mitigante enorme para determinar si Eli iba a sobrevivir o no. Para mí, cuando llegamos a Eli y lo sacamos del agua, no vi a Eli. Vi a mi hijo, Sawyer”, dijo Depies. Primero otro oficial y luego Bergersen le practicaron reanimación cardiopulmonar al niño, mientras le suplicaban que aguantara. Después de varios minutos, Bergersen lleva a Eli a una ambulancia que acaba de llegar.
Pero no fue hasta mucho después que supieron que Eli salió adelante. “Sentí un gran alivio. Es como quitarme un peso de encima”, dijo Depies. “Me sentí increíble. Me dije a mí mismo: ‘No sé qué haría si él no sobreviviera porque acabo de ver a mi pequeño hijo también'”, dijo Bergersen.
Por sus acciones ese día, Bergersen y Depies recibieron el más alto honor del Departamento de Policía de Minneapolis, la Medalla al Valor. “No hacemos este tipo de cosas para obtener reconocimiento”, afirmó Depies. Pero dicen que la mayor recompensa es saber que salvaron la vida de Eli. “Estoy feliz de haber estado trabajando ese día y de haber llegado a la escena tan rápido como lo hice y haber actuado de la forma en que lo hice. Le dimos una segunda oportunidad y eso se siente bien”, dijo Bergersen.
