Honrar a los miembros del servicio que hicieron el máximo sacrificio es lo más importante este Día de los Caídos. El Cementerio Nacional de Snelling en Minneapolis fue solo uno de los muchos escenarios para las ceremonias del lunes, publicó Canal 4 CBS.
Más de 1.200 personas asistieron a la ceremonia de la mañana, que comenzó con una presentación de coronas y el desfile. Fue seguido por comentarios de líderes locales, incluido el gobernador Tim Walz y el teniente comandante retirado de la Reserva de la Marina de los Estados Unidos, Mike Peterson.
“Es un regalo increíblemente precioso vivir como las personas más libres y hacer lo que elegimos”, dijo Walz. “Ese es un regalo que dan los que yacen aquí. Un regalo que es inimaginable en la mayor parte del mundo”. La ceremonia de una hora terminó con un saludo de rifle y toques de tap.
Veteranos como Lee Saunders de Brooklyn Park, que sirvió en la Fuerza Aérea, dijeron que el mensaje del evento no se les escapa décadas después de haber servido. “Sé la importancia de hoy y sé la importancia de nuestra libertad y cómo las personas sacrificaron sus vidas para que podamos vivir en una nación libre y eso es lo que aprecio de Estados Unidos”, dijo.
Los voluntarios pasaron el fin de semana colocando unas 190.000 banderas en el cementerio donde están enterrados los miembros del servicio militar estadounidense y sus cónyuges. Todavía se necesitan voluntarios el próximo fin de semana para quitar todas esas banderas para que puedan usarse nuevamente el próximo año.
