El gobierno de Joe Biden reconoció que no tiene la capacidad para rastrear a todos los inmigrantes hallados, procesados y luego liberados en la frontera con México, la mayoría en espera de la resolución de sus casos de asilo en los tribunales de inmigración, indicó una nota periodística de Univisión.com. “Nuestro sistema de inmigración está roto y desactualizado y el Congreso necesita arreglarlo”, dijo el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) en un correo electrónico en respuesta a una pregunta de Univision Noticias respecto a un reciente informe elaborado por el Inspector General del DHS sobre la vigilancia de extranjeros liberados.

“Incluso bajo estas leyes obsoletas, el Departamento ha mejorado la forma en que se procesa y examina a los no ciudadanos. Las personas que buscan venir a los Estados Unidos son examinadas por el DHS y nuestros socios de inteligencia y contraterrorismo para evitar que cualquiera que represente una amenaza ingrese al país”, precisó el ministerio. El pasado 6 de enero la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional (IG-DHS) publicó un informe titulado ‘DHS no tiene garantía de que todos los inmigrantes pueden ser localizados una vez liberado en Estados Unidos’.

El reporte precisa que el DHS “tiene una capacidad limitada para rastrear con precisión las direcciones de los migrantes después de su liberación y de manera eficaz”. Y agrega que la Patrulla Fronteriza “no siempre puede obtener y no siempre registra direcciones de inmigrantes”. A su vez, señala que la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) “no siempre valida las direcciones de inmigrantes antes a la liberación” de estos bajo el Programa Alternativo de Detención (ATD), que se utiliza en extranjeros que no representan una amenaza para la seguridad pública y nacional de Estados Unidos y no constituyen una prioridad de deportación.

De acuerdo con la auditoría del IG-DHS, “registros de inmigrantes documentados por la Patrulla Fronteriza desde marzo de 2021 hasta agosto de 2022, las direcciones de más de 177,000 registros de extranjeros faltaban o eran inválidos para entrega o ubicaciones residenciales no legítimas”. Y agrega que “además de los inmigrantes, al no proporcionar direcciones de divulgación en Estados Unidos, el DHS enfrentó varios desafíos que obstaculizaron su capacidad para registrar y validar las direcciones de los migrantes según sea necesario”.

El estudio del IG-DHS precisa además que la Patrulla Fronteriza “no captura con precisión y eficacia direcciones válidas, en parte debido al gran número de inmigrantes aprehendidos (en la frontera con México durante las fechas que incluye la investigación), así como su limitada coordinación con ICE y su autoridad limitada para administrar el cumplimiento de los requisitos de dirección”.

En promedio, el DHS libera a más de 60,000 inmigrantes cada mes, se lee en el informe. “ICE debe poder localizar a inmigrantes para hacer cumplir las leyes de inmigración, incluso arrestar o deportar a personas que se consideren amenazas potenciales a la seguridad nacional”, subraya. La oficina del IG-DHS indica además que “el notable porcentaje de faltantes, inválidos o direcciones duplicadas en el archivo, significa que es posible que el DHS no pueda localizar a los migrantes después de su liberación”.

“Mientras el Departamento continúa aprehendiendo y liberando a decenas de miles de inmigrantes cada mes, direcciones válidas posteriores a la liberación son esenciales”, dice el reporte. En el informe, el IG-DHS indica que según la guía interna de la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP), los agentes de la Patrulla Fronteriza están “obligados a llenar (en los formularios de liberación) el campo de dirección en Estados Unidos (de los extranjeros)” antes de proceder a su liberación.

“Esta guía instruye a la Patrulla Fronteriza escribir los destinos previstos de los migrantes”, precisa. Pero al buscar algunas direcciones posteriormente la base de datos indicó que se trataba de domicilios inválidos. “Aunque no es obligatorio, observamos que algunos agentes de la Patrulla Fronteriza llaman (se comunican) al punto de contacto del migrante para verificar la dirección en Estados Unidos. Pero la capacidad de la agencia para obtener una dirección depende de que los migrantes proporcionen una dirección válida, lo cual no siempre es posible”.

El reporte dice además que numerosos funcionarios de ICE y la Patrilla Fronteriza con los que nos reunimos dijeron que algunos inmigrantes “no tienen una dirección que proporcionar” cuando son procesados”.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here