Los investigadores federales dicen que el ferrocarril BNSF está analizando una sección de riel fracturado después del descarrilamiento del mes pasado que provocó evacuaciones en el suroeste de Minnesota, pero no dijeron definitivamente que el riel roto causó el accidente, confirma la nota periodística de Canal 4 CBS. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte emitió su informe preliminar el martes sobre el descarrilamiento del 30 de marzo que obligó a unas 800 personas a abandonar sus hogares en Raymond, Minnesota, luego de que 10 automóviles de etanol descarrilaran y varios de ellos se incendiaran por la fuga de aditivo de combustible. Esos autos de etanol estaban entre los 23 autos que salieron de las vías poco antes de la 1 AM de ese día.

El fuego ardió hasta el día siguiente antes de que los bomberos pudieran extinguirlo, pero nadie resultó herido y todos los evacuados pudieron regresar a casa dentro de las 12 horas posteriores al descarrilamiento. Los investigadores estimaron que el descarrilamiento causó $ 1.9 millones en daños al equipo ferroviario y las vías.

Este descarrilamiento de Minnesota solo se sumó a las crecientes preocupaciones sobre la seguridad del ferrocarril a raíz del feroz descarrilamiento de Norfolk Southern del 3 de febrero en las afueras de East Palestine, Ohio. Aproximadamente la mitad de la ciudad de unos 5.000 habitantes tuvo que evacuar en los días posteriores al descarrilamiento, cuando se liberaron y quemaron sustancias químicas peligrosas, lo que dejó a muchos residentes con dudas sobre el potencial de problemas de salud a largo plazo.

Las personas que viven alrededor del descarrilamiento que ocurrió cerca de la frontera de Pensilvania exigen más respuestas mientras el ferrocarril trabaja para limpiar el suelo y el agua contaminados. El director ejecutivo de Norfolk Southern testificó ante la legislatura de Ohio el martes después de comparecer previamente en dos audiencias del Congreso centradas en posibles reformas de seguridad ferroviaria.

La NTSB dijo que dos de los vagones de etanol se perforaron durante el descarrilamiento de Minnesota a pesar de que eran modelos mejorados de vagones cisterna que fueron diseñados para resistir fugas después de una serie de descarrilamientos de petróleo crudo y etanol hace una década. El fuego de esos autos de etanol con fugas dañó las juntas de otros tres autos de etanol cercanos, lo que provocó que también tuvieran fugas, a pesar de que las juntas estaban clasificadas para soportar temperaturas de hasta 225 grados Fahrenheit (107,2 grados Celsius).

El ferrocarril con sede en Fort Worth, Texas, no respondió de inmediato al informe de la NTSB. Pero el director ejecutivo de BNSF no tardó en disculparse por el descarrilamiento y prometió una limpieza a fondo el día que ocurrió. Los investigadores dijeron que en el momento del descarrilamiento, el tren iba a 43 mph, que está por debajo del límite de velocidad de 49 mph para el área. El descarrilamiento de Minnesota ocurrió a unas 100 millas (161 kilómetros) al oeste de Minneapolis. El informe completo de la NTSB sobre el descarrilamiento, que identificará la causa, puede tardar más de un año en completarse. La tripulación del tren de 40 vagones incluía un maquinista, un conductor, un guardafrenos y un conductor en prácticas. Ninguno de ellos resultó herido.

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