Por Armando Pereda Maldonado
Una de las presentaciones más esperadas por los asistentes del Festival Arre, en este segundo día de actividades, es la de Yahritza y su esencia, grupo de regional que se ha visto involucrado en la polémica debido a las desafortunadas declaraciones que han hecho sobre la cultura mexicana en algunas ocasiones.
Esta noche y en punto de las 18:53 horas, la agrupación conformada por los hermanos Yahritza, Mando y Jairo arribaron al escenario del festival con la incógnita de cómo serían recibidos, pero sobre todo con las ganas de dejar su huella entre el público y reivindicarse con los mexicanos.
No pasó mucho para que la duda se despejara, la banda salió al escenario y algunos aplausos pudieron escucharse, pero también los rechiflidos de aquellos que se sintieron ofendidos por sus palabras; sin embargo el poder que tiene la música o quizás el morbo, pudo más que cualquier otra cosa, pues aunque la gente tardó en llegar, prácticamente llenaron el recinto.
“México, gracias por estar aquí esta noche se les agradece”, dijo la vocalista al inicio de su presentación, para después dar paso con algunos de sus temas, que poco, pero sí fueron coreados.
La velada fue avanzando y después de que sonara el tema “No se puede decir adiós”, en lugar de aplausos lo que se pudo escuchar fueron los gritos poco amigables del público que parecían estar en desacuerdo con su presentación: “Que se vayan” y “Fuera”, era coreado.
“Los quiero un chingo, muchas gracias”, replicó Yahritza como haciendo caso omiso a la rechifla, quizá nerviosa, quizá más concentrada en dejarlo todo y hacer de esta una presentación que marque un nuevo destino para ellos.
Entre el público puede escucharse “¡Puro chicken, puro chicken!”, recordando las palabras de Jairo al referirse a la comida mexicana.
En otra pausa, Yahritza se enfrentó a su primera interacción con los chilangos, “Los veo medio calladitos”, dijo, al ver que muy pocos se animaban a cantar con ella. Llegó el turno a la canción “Dos extraños” y la joven de 16 años tomó la arriesgada decisión de bajar del escenario y saludar a los fans que se encontraban en las primeras filas.
La decisión está dividida, algunos expresan su emoción al abrazarla, lloran y grita, pero otros prefieren cederle el paso a alguien más.
Si bien el ambiente ya era tenso, lo que más llamó la atención fue que los elementos de seguridad pidieron a la prensa que se encontraba presente no grabar los abucheos que recibió el grupo.
Pero la seriedad pareció desparecer como por arte de magia, cuando las primeras notas de “Frágil”, tema en el que colaboran con Grupo Frontera, comenzó a sonar, y es que al mismo tiempo todos los asistentes alzaron sus celulares y se unieron a una sola voz ya no para recriminar sino para cantar.
En una representación de sus raíces mexicanas, los jóvenes cantantes no dudaron en interpretar una de las canciones más emblemáticas de la música mexicana: “El sinaloense” y para no faltar a la tradición, hasta zapateado hubo.
Después de casi 40 minutos de actuación, los originarios de Washington se despidieron con un cover del tema “Qué agonía”, que originalmente canta Yuridia con Ángela Aguilar. “Gracias México, los amo”, finalizó Yahritza pero en esta ocasión no hubo respuesta.
La banda pasó su primera prueba de fuego y solo queda esperar a ver cómo serán recibidos este próximo 15 de septiembre cuando se unan a Grupo Frontera en los festejos por el Día de la Independencia.