Washington.— Estados Unidos ha deportado a más de 145 mil migrantes que llegaron a la frontera con México en los últimos tres meses, informó ayer un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Desde el 12 de mayo, cuando comenzaron a entrar en vigor las nuevas normas impuestas por el gobierno de Joe Biden, las autoridades migratorias han expulsado a cientos de miles de personas que cruzaron la frontera de manera irregular y no cumplieron con los nuevos requisitos para solicitar asilo. El encargado de comunicaciones del DHS, Luis Miranda, señaló en una conferencia de prensa telefónica que Estados Unidos sigue “imponiendo consecuencias a quienes no tienen una base legal” para permanecer en el país.
Las reglas dificultan que quienes hayan venido por tierra hacia la frontera con México puedan pedir asilo en EU, a menos que soliciten una cita en una aplicación móvil o se les haya negado protección en un tercer país. A pesar de las restricciones, el número de arrestos de migrantes que intentan cruzar la frontera sur ha aumentado en el último mes, dijo el DHS.
Miranda destacó que este incremento se ha dado en parte por un “aumento en el número de familias, en especial de países como Guatemala” que llegan a la frontera sur de EU. “A diario hemos visto que más o menos la mitad de las personas que están llegando son familias”, subrayó el funcionario; sin embargo, no dio datos precisos sobre cuántas familias han sido detenidas.
El diario The Washington Post adelantó que más de 130 mil personas fueron arrestadas en la frontera con México, según datos del DHS que no habían sido publicados.
Reabrirá oficina en Cuba
Mientras, EEUU anunció que reabrirá una oficina en La Habana que se encargará de los trámites para la reunificación familiar y las solicitudes de parientes de refugiados.
En un comunicado, el DHS informó que la oficina de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) estará a cargo de “la realización de entrevistas y el procesamiento de casos pendientes” de reunificación familiar.
Esta reunificación sólo es posible por invitación del Departamento de Estado estadounidense al familiar que viva en EU, como ciudadano estadounidense o residente. La invitación se cursa si se aprueba el formulario que este último debe presentar a nombre del beneficiario cubano.
La oficina en La Habana atenderá las peticiones de refugiados y personas a las que se les ha concedido asilo para que traigan a sus familiares a Estados Unidos.