El príncipe Harry y su esposa Meghan Markle protagonizan una ‘persecución casi catastrófica’ en Estados Unidos, informó su portavoz.
El portavoz dio declaraciones a la agencia Reuters, en las que señaló que “esta persecución implacable, que duró más de dos horas, resultó en múltiples colisiones cercanas que involucraron a otros conductores en el camino, peatones y dos policías de Nueva York”.
El incidente se produjo después de que el Duque y la Duquesa de Sussex asistieran el martes a una entrega de premios en Nueva York, explicó el portavoz, citado por BBC News.
“Aunque ser una figura pública conlleva un nivel de interés por parte del público, nunca debería hacerse a costa de la seguridad de nadie”, dijo el portavoz.
“La difusión de estas imágenes, dadas las formas en que se obtuvieron, fomenta una práctica altamente intrusiva que es peligrosa para todos los implicados”.
De acuerdo con The New York Post, el duque y la duquesa de Sussex, que viajaban con la madre de Markle, Doria Ragland, fueron perseguidos aterradoramente por los fotógrafos después de salir del Teatro Ziegfeld – donde la exactriz fue honrada por Gloria Steinem en los Premios Mujeres de Visión – en Manhattan el martes por la noche.
El trío abandonó el evento en un todoterreno alrededor de las 10 de la noche, e inmediatamente fueron seguidos por unos 12 paparazzi. Una fuente dijo al Post que un cámara chocó contra un coche, mientras que otro casi atropella a un agente de policía de Nueva York, durante la persecución “casi mortal”.
“Comenzó con 12 paparazzi y terminó con cuatro persiguiendo [a Meghan, Harry y Doria]”, nos dice la fuente. “Su seguridad hizo todo lo posible para perder [a los fotógrafos]”, narró al diario.
La fuente dijo al Post que el incidente fue “absolutamente impactante” y dice que Ragland, que tiene 66 años, estaba particularmente “aterrorizada” por la terrible experiencia. “Todo el mundo está todavía disgustado, por no decir otra cosa. Fue horrible”. La policía de Nueva York no se ha pronunciado sobre el tema.
Lo ocurrido hizo recordar el accidente en el que murió la madre de Harry, la princesa Diana, el 31 de agosto de 1997, cuando el vehículo en el que viajaba era perseguido por paparazzis y terminó impactándose en un túnel.