Una unidad de élite de las Fuerzas de Defensa de Israel llevó a cabo una incursión muy inusual en Siria a principios de esta semana y destruyó una fábrica subterránea de misiles de precisión que Israel y Estados Unidos afirman fue construida por Irán, informó Axios, citando a tres fuentes informadas de la operación.
Según el diario The New York Time, la fábrica pertenecía a Hezbolá. La operación incluyó una audaz incursión de las fuerzas especiales israelíes, que descendieron a rapel desde helicópteros y aparentemente se apoderaron de materiales de la instalación de misiles.
Se utilizaron fuerzas terrestres en el ataque debido a su complejidad y para recuperar información del emplazamiento secreto de armas. Las fuentes del Times señalaron que no hubo víctimas israelíes.
Los funcionarios dijeron que la incursión incluyó ataques aéreos en el sitio en expansión, el Centro de Estudios Científicos e Investigación, que se encuentra cerca de Masyaf, en el noroeste del país.
Los medios de comunicación estatales sirios y la organización opositora siria informaron de fuertes ataques aéreos de la Fuerza Aérea israelí el domingo por la noche hora local en varias zonas del oeste de Siria, entre ellas cerca de la ciudad de Masyaf, próxima a la frontera con Líbano.
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