Por Ángel Santamaría
Al menos 30 personas murieron después de que Japón fuera azotado por un terremoto.
Las autoridades de la ciudad de Wajima confirmaron las muertes y agregaron que otras siete personas resultaron gravemente heridas.
Las réplicas continuaron afectando a la prefectura de Ishikawa, la zona más afectada en la relativamente remota península de Noto, un día después del terremoto de magnitud 7. 6.
Se advirtió a algunos lugareños que se mantuvieran alejados de sus hogares debido al riesgo de nuevos terremotos fuertes, reportan medios como Sky News.
Los esfuerzos de rescate se han visto obstaculizados por carreteras muy dañadas y bloqueadas en la región, y uno de los aeropuertos de la zona se ha visto obligado a cerrar debido a grietas en su pista.
El potente terremoto que golpeó el centro de Japón el día de Año Nuevo causó “cuantiosos” daños y “numerosas” víctimas, afirmó el martes el primer ministro Fumio Kishida.
“Se han confirmado daños muy cuantiosos, incluidas numerosas víctimas, edificios colapsados e incendios”, declaró Kishida a periodistas, citando una “carrera contra el tiempo” para rescatar a los afectados.
El terremoto se produjo en la península de Noto, en la prefectura de Ishikawa, a las 16:10 (7:10 GMT) a escasa profundidad y con una intensidad de 7 en la escalada japonesa cerrada de 7 que se centra en la capacidad destructiva de los temblores.
En torno a las 16:40 (7:40 GMT) la Agencia Meteorológica de Japón (JMA) notificó que se había producido una fuerte réplica del temblor en Ishikawa.
ag
