El pasado 7 de junio la Policía ecuatoriana informó acerca de una operación que conmocionó al país entero. Según revelaron, una mujer de 24 años fue capturada por presuntamente intentar vender a su bebé de seis meses a través de Facebook.
El comprador sería un estadounidense, quien estaba dispuesto a pagar 100 mil dólares para quedarse con la menor. Esto fue alertado por el FBI y gracias a un agente encubierto que se contactó con la joven se pudieron reunir las pruebas suficientes.
El Comandante General de la Policía Nacional del Ecuador, Fausto Salinas Samaniego, informó en sus redes sociales: “Aprehendimos a una ciudadana, quien a través de redes sociales estaría ofertando a una infante (hija) por una alta cantidad de dinero”.
Las autoridades allanaron la morada y rescataron a la bebé, quien ahora está bajo el cuidado del Sistema de protección de niños para el restablecimiento de sus derechos.
Entretanto, se especula que la madre podría enfrentar entre 16 y 19 años de prisión, pues lo que hizo constituiría el delito de trata de personas, con el agravante de que la víctima es vulnerable, definido así en el artículo 91 del Código Orgánico Integral Penal (COIP):
“Toda persona que capte, transporte, traslade, retenga o reciba; en el país, desde o hacia otros países con fines de explotación; para lo cual un tercero recurre a la amenaza, uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad, a la concesión o aceptación de pagos o beneficios, constituye delito de trata de personas”.