Londres.- Kate Middleton, princesa de Gales, salió por segunda vez del retiro en el que vive tras ser diagnosticada de cáncer para presenciar en directo la exhibición de tenis con la que el español Carlos Alcaraz se llevó su segundo trofeo de Wimbledon, y fue recibida con una gran ovación.
Acompañada por su hija, la princesa Charlotte, Kate no se perdió ni un detalle de la final, que siguió desde el palco de honor.
Ataviada con gafas de sol y un vestido de color púrpura, la princesa de Gales aplaudió con ganas muchos de los puntos entre Alcaraz y su rival, el serbio Novak Djokovic, mientras comentaba con su hija los avatares del partido.
Pese a que el sábado no presidió la final femenina de Wimbledon, Kate, que es patrona del All England Lawn Tennis and Croquet Club, es una reconocida seguidora de este deporte.
Llegó una hora antes del comienzo de la final al palco y fue recibida con una fuerte ovación por el público que ya poblaba gran parte de las gradas de la pista Central del torneo.
Kate -quien según la última actualización médica ha hecho progresos en su lucha contra la enfermedad pero continúa recibiendo quimioterapia- sonrió al público y saludó a la multitud mientras tomaba asiento al lado de Charlotte y de su hermana Pippa.
Tras el emocionante final del partido, la princesa salió a la pista, de nuevo bajo una atronadora ovación, para entregar los trofeos.
En el paseíllo que hicieron los recogepelotas, se detuvo a departir con varios de ellos luciendo una sonrisa radiante.
Y tras entregar el trofeo de campeón a Alcaraz, asistió a las entrevistas a pie de pista con el campeón y el finalista.
La importancia de la cita para la princesa queda en evidencia si se tiene en cuenta que Kate solo había aparecido en público una vez desde que le fue diagnosticado un cáncer que no ha sido especificado, y fue el pasado junio en el desfile que celebra el cumpleaños oficial del rey Carlos III.
Antes de tomar asiento, Kate y Charlotte fueron recibidas por algunos de los tenistas británicos más destacados de la actualidad, entre ellos la campeona del US Open, Emma Raducanu.
En el palco la acompañaron leyendas del tenis del calibre de André Agassi, Chris Evert, Rod Laver, Ken Rosewall o Stefan Edberg.
En representación del Gobierno español, estuvo presente en la final el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
También estuvieron en el palco los actores Benedict Cumberbatch y Tom Cruise, o el alcalde de Londres, Sadiq Khan.
Mientras la princesa de Gales presenciaba en directo la final de Wimbledon, su marido, el príncipe Guillermo, se desplazó a Berlín para apoyar con su presencia a la selección de Inglaterra en la final de la Eurocopa frente a España.