El lanzamiento de un misil hipersónico de Corea del Norte la semana pasada detonó nuevas preocupaciones sobre la carrera en curso para adquirir esta alarmante tecnología contra la que es difícil defenderse y que podría alterar el equilibrio nuclear mundial.
Rusia, que dijo el lunes haber probado un misil hipersónico desde un submarino sumergido por primera vez, lidera la carrera, seguido de China y Estados Unidos, mientras al menos otros cinco países investigan la tecnología.
Los misiles hipersónicos, al igual que los tradicionales misiles balísticos que pueden cargar armas nucleares, pueden volar hasta a más de cinco veces a la velocidad del sonido.
Pero los misiles balísticos vuelan alto en el espacio en una forma de arco para llegar a su objetivo, mientras un hipersónico vuela en una trayectoria baja en la atmósfera, lo que les permite alcanzar el objetivo más rápidamente.
Además, un misil hipersónico se puede maniobrar (como el mucho más lento misil de crucero): esto lo hace más difícil de rastrear e interceptar.
Mientras países como Estados Unidos han desarrollado sistemas diseñados para defenderse contra misiles balísticos y de crucero, la habilidad para rastrear e interceptar un misil hipersónico sigue siendo una incógnita.
Los misiles hipersónicos pueden ser usados para lanzar ojivas convencionales más rápidamente y de forma más precisa que con otros misiles.
Pero su capacidad para lanzar armas nucleares puede incrementar el nivel de amenaza de un país, así como el riesgo de un conflicto nuclear.
Rusia, China, Estados Unidos y ahora Corea del Norte ya lanzaron misiles hipersónicos de prueba.
Francia, Alemania, Australia, India y Japón trabajan sobre el tema, e Irán, Israel y Corea del Sur desarrollaron investigaciones básicas sobre la tecnología, según un reciente informe del Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos (CRS en inglés).
Rusia es la más avanzada. Moscú anunció el lunes haber disparado dos misiles hipersónicos Zircon desde el submarino nuclear Severodvinsk.
El primero, lanzado mientras el submarino estaba en superficie, impactó un objetivo de prueba en el mar de Barents. El segundo fue lanzado cuando la embarcación estaba sumergida a 40 metros.
La carrera de China
China también desarrolla agresivamente la tecnología, pues ve en ella una oportunidad crucial para defenderse contra el adelanto de Estados Unidos en misiles hipersónicos y otras tecnologías, según el CRS.
Tanto Rusia como China “parecen haber alcanzado una capacidad operacional” con vehículos planeadores hipersónicos, señala el informe.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos lleva a cabo un agresivo programa de desarrollo, con más de 40 pruebas programadas en los próximos cinco años, según un informe de gobierno.
El Pentágono probó un misil hipersónico impulsado por un estatorreactor (scramjet) la semana pasada, al que consideró “una demostración exitosa de las capacidades que harán de los misiles cruceros hipersónicos una herramienta altamente eficiente para nuestros combatientes”.
El anuncio de la prueba norcoreana sugiere que les falta mucho para estar listos, ya que la prueba se enfocó en “maniobrabilidad” y “características de vuelo”.
“De acuerdo con una evaluación de sus características como velocidad, se encuentra en una fase inicial de desarrollo y tomará un tiempo considerado en ser desplegado”, dijeron en un comunicado los ejércitos surcoreano y estadounidense.
¿Amenaza global?
Los expertos dicen que los misiles hipersónicos no cambiarán necesariamente el equilibrio nuclear mundial, pero en cambio agregan un poderoso nuevo método de lanzamiento a la tradicional tríada de bombarderos, misiles balísticos intercontinentales lanzados desde el suelo o desde submarinos.
Un riesgo importante será saber si el misil hipersónico de un adversario carga un ojiva tradicional o nuclear.
Y, resaltando lo “atractivo” del producto, el CRS señala que el sistema de defensa antimisil de Estados Unidos es inadecuado para detectar, rastrear e interceptar misiles hipersónicos.
Cameron Tracy, experto en control de armas de la Universidad de Standford, llamó a los hipersónicos un “avance” evolutivo.
“Definitivamente no cambia las reglas del juego”, señaló. “Es una carrera armamentista (…) En buena medida, se trata de mostrar que tendrás primero cualquier arma desarrollable”, agregó.
La solución, según Tracy, consiste en incluir los misiles hipersónicos en las negociaciones para el control de armas nucleares, aunque China y Corea del Norte no hacen actualmente parte de ningún acuerdo.
“El desarrollo de estas armas, en esta carrera de armamento hipersónico, no es probablemente la situación más estable. Así que sería bueno actuar tan pronto como sea posible”, agregó.