El padre de una niña polaca nacida por fecundación in vitro planea denunciar al ministro de Educación y al autor de un libro de texto escolar donde se llama “productos” a las personas concebidas bajo este procedimiento.
Kamil Mieszczankowski, cuya hija nació tras un tratamiento de fertilidad, puso en marcha hace unos días una petición pública de fondos a través de internet para conseguir los 7 mil euros que le permitirían iniciar un proceso judicial y este jueves llevaba recaudados más de 75 mil euros.
Mieszczankowski tomó esta iniciativa tras conocer que, en un libro de texto que empezará a enseñarse en las escuelas polacas desde septiembre, se dice que “con los avances médicos y la ofensiva de la ideología de género, el siglo XXI ha traído aún más decadencia a la institución de la familia (…) y el modelo de familia inclusiva que se defiende actualmente incluye la creación de niños en un laboratorio”.
“Esta producción de humanos plantea la pregunta: ¿quién va a amar a los niños producidos de este modo?”, se puede leer en el texto.
En una carta publicada en sus redes sociales, Mieszczankowski explica que “en Polonia, un número creciente de parejas tiene problemas de fertilidad, pero parece que a quienes están en el poder solo les interesa estigmatizar a los padres de niños que, gracias a la fecundación in vitro, consiguen tener familias”.
“No permitiré que nadie señale con el dedo a mi hija en una escuela pública y la describa como un objeto de experimentación y una niña no amada por sus padres, así que haré todo lo que pueda para asegurarme de que, cuando ella empiece el curso, este libro de texto sea parte del pasado y un infame testimonio de los tiempos que vivimos”, añade el padre en su comunicado.
La redacción del libro “Historia y Presente” se empleará en una nueva asignatura introducida a partir de este año en el sistema educativo polaco y estuvo envuelta en la polémica desde su inicio.
Anna Landau, una de las científicas que formaba parte del comité responsable del texto, anunció su dimisión recientemente por desacuerdos con los contenidos del libro, que ha sido criticado por varios políticos de la oposición.
El ministro polaco de Educación, Przemyslaw Czarnek, es conocido por sus opiniones ultra conservadoras y ha afirmado en varias ocasiones que quiere introducir “las enseñanzas de (el papa) Juan Pablo II” en el sistema educativo polaco.
Según el Instituto de Ginecología polaco, el 20 % de las parejas en edad fértil tienen problemas de infertilidad (3 millones de personas) y, según datos del Banco Mundial, Polonia tiene una de las tasas de fertilidad más baja del mundo, con menos de 1,4 nacimientos por pareja en 2020.
En 1987 nació en Bialystok (este) el primero de los más de 22.000 polacos concebidos por fecundación in vitro, pero en 2016 la Seguridad Social polaca dejó de cubrir este tratamiento y, como alternativa, el Gobierno ultraconservador del partido PiS ofrece el método llamado “NaPro” (que alude a la procreación natural), ideado por el Instituto Pablo VI de Omaha (EU) en los años 80, que rechaza cualquier intervención en el cuerpo de la mujer.
El Gobierno polaco es el único en el mundo en implantar el sistema “NaPro” a escala nacional.
melc