Cuando los habitantes de Minnesota se despertaron el jueves por la mañana, Mark Vande Hei, un astronauta y nativo de Minnesota, regresó a la Tierra después de su viaje récord a bordo de la Estación Espacial Internacional. Según detalla la historia periodística de Canal 5 ABC, Vande Hei aterrizó en Kazajstán alrededor de las 6:30 am del jueves CT con dos cosmonautas rusos, luego de que algunos se preocuparan por su regreso seguro. Ahora viajará a la sede de la NASA en Houston.

The Associated Press informa que un pequeño equipo de médicos y otro personal de la NASA estuvo presente para el aterrizaje y planeaba regresar de inmediato a los Estados Unidos con el hombre de 55 años. A pesar de las diferencias sobre el terreno entre los dos países, Vande Hei y los dos cosmonautas se reunieron en el espacio como colegas para su viaje seguro a casa.

Justo antes de la medianoche, Vande Hei, que creció en las Ciudades Gemelas, abordó la nave espacial rusa Soyuz para aterrizar en Kazajstán, comenzando su tan esperado regreso a casa después de pasar un récord estadounidense de 355 días en el espacio. Habló sobre el logro la semana pasada. “Realmente, lo importante fue reconocer que tenía que concentrarme en lo que estaba haciendo en ese momento. Una cosa más: tratar de buscar cosas por las que estar agradecido en lugar de quejarse. Eso contribuye en gran medida a que cualquier cosa que esté haciendo sea más apetecible”, dijo Vande Hei.

A principios de este mes, el jefe de la Agencia Espacial Rusa publicó en las redes sociales amenazando con abandonar a Vande Hei en la estación espacial a medida que aumentaban las tensiones debido a la guerra en Ucrania. Esas tensiones no se vieron a bordo de la ISS a más de 200 millas sobre la Tierra; en cambio, hubo una demostración de unidad cuando el grupo partió.

Durante la tradicional ceremonia de cambio de mando, el comandante ruso de la estación espacial dijo que “la gente tiene problemas en la tierra, en órbita, somos una sola tripulación”. Luego, el cosmonauta ruso y el astronauta estadounidense se abrazaron cuando la llave simbólica de la estación espacial fue entregada al nuevo comandante. Se espera que un alto funcionario ruso discuta cualquier posible futuro vuelo espacial ruso-estadounidense en algún momento del jueves.

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