Por Oscar Torres
Aquel tropiezo que sufrió Red Bull en Melbourne fue un simple mal fin de semana para el equipo campeón de la Fórmula 1. Este domingo el equipo austriaco volvió a dar un golpe de autoridad y logró el 1-2 con Max Verstappen y Checo Pérez en el Gran Premio de Japón 2024.
La gestión de neumáticos, buena estrategia con los mismos, las rápidas detenciones en boxes y el talento del neerlandés y el mexicano han puesto a los Toros Rojos en donde han estado desde que empezó la temporada, salvo Albert Park.
La carrera entretenida, desde el arranque con el accidente en la vuelta uno que dejó fuera a Daniel Ricciardo (RB) y Alex Albon (Williams), los destellos de Lando Norris (McLaren) y la fuerte pelea que dieron Carlos Sainz -tercero- y Charles Leclerc -cuarto- de Ferrari, volantes que en algunas vueltas lideraron este Grand Prix.
Más atrás, Mercedes en su propia lucha, la de lograr hacer competir al monoplaza de la mano de los experimentados George Russell y el multicampeón del mundo Lewis Hamilton. Por su parte, Fernando Alonso llevando al límite el Aston Martin pero lejos de los primeros tres.
El piloto local, Yuki Tsunoda, con buen trabajo en la pista (décimo con un punto a la bolsa) y más atrás nombres como Kevin Magnussen, Valtteri Bottas o Lance Stroll.
En Suzuka, además de Albon y Ricciardo, abandonó el chino Guanyu Zhou (Sauber) y en competencia el lugar 17 fue ocupado por Logan Sargeant (Williams).