México le advirtió a una corte federal de Estados Unidos que si sus jueces permiten la implementación de la controvertida ley de inmigración de Texas, los dos países enfrentarán una “tensión significativa” con consecuencias de largo alcance para las relaciones entre ambas naciones, publicó CNN en su portal de noticias.

En un escrito presentado este jueves ante la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de Estados Unidos, los abogados de México señalaron que las relaciones con Estados Unidos serían tensas. “La implementación de la SB4 sobrecargaría inapropiadamente las relaciones uniformes y predecibles de soberano a soberano entre México y Estados Unidos, al criminalizar la entrada no autorizada de no ciudadanos a Texas desde fuera del condado y al crear requisitos de expulsión divergentes entre los estados individuales y el Gobierno nacional”, escribieron en el documento.

También señalaron que la aplicación de la polémica ley además “interferiría con el derecho de México a determinar sus propias políticas con respecto a la entrada a su territorio, socavaría la colaboración entre Estados Unidos y México en un marco legal de migración y gestión de fronteras, y obstaculizaría el comercio” entre los dos países, señalaron los abogados al tribunal.

La ley, que promulgó el gobernador republicano Greg Abbott en diciembre, penaliza la entrada ilegal en Texas al considerarla un delito estatal, y permite a los jueces estatales ordenar la deportación de inmigrantes. En general, la aplicación de las leyes de inmigración es una función que corresponde al Gobierno federal de Estados Unidos.

El Quinto Circuito actualmente evalúa si permitir que Texas implemente la polémica ley, mientras considera el asunto más amplio de si la medida viola la Constitución de Estados Unidos. Un panel de tres jueces del tribunal de apelaciones volvió a suspender la ley la noche de este martes, después de que la Corte Suprema despejara el camino para que entrara en vigor por un breve periodo ese mismo día.

Los escritos como el de México, que técnicamente se denomina escrito amicus curiae, los presentan terceras partes para ofrecer experticia judicial e información sobre un caso en desarrollo. La decisión de permitir este tipo de documentos queda a discreción de cada tribunal. Algunos pueden presentar sus argumentos en apoyo de una parte en particular o no apoyar a ninguna de las partes.

México dijo que respaldaba a quienes impugnan la ley, entre los que se encuentra el Gobierno de Biden. Los abogados argumentaron en el escrito de este jueves que la medida –si se permite que entre en vigor– “se aplicará de manera discriminatoria”. A los 11 consulados de México en Texas se les ha ordenado brindar protección y orientación, además de tener apoyo legal a disposición de cualquier ciudadano mexicano en todo el estado que “comience a tener un problema”, según la nueva ley, dijo el jueves la secretaria de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena.

“Esta ley es profundamente inconstitucional”, señaló Bárcena, argumentando que los asuntos de inmigración en Estados Unidos están bajo jurisdicción federal, al igual que en México. “Entonces no vamos a permitir ninguna acción por parte del estado de Texas, ni de las autoridades, ni de la policía, ni de nadie que actúe en materia migratoria a nivel estatal, a nivel de condado, esto es un asunto federal y para nosotros también. Así que ahí estamos”, afirmó la funcionaria.

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